En un "descuido", empleado de una cadena de comida rápida puso cocaína dentro de un perro caliente

Un empleado de la cadena estadounidense de comida rápida Sonic fue arrestado después de que una mujer encontrará cocaína en una orden deperro caliente que este le había preparado. Al parecer, la sustancia se le habría caído por accidente al empleado.

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Lo que parecía ser un pedido normal en el autoservicio de la cadena Sonic terminó siendo una pesadilla para una mujer de la ciudad de Española, en Estados Unidos, cuando dentro de su comida se encontró con una desagradable e ilegal sustancia.

La mujer, quien se acercó al restaurante para pedir un "coney", un tipo de perro caliente recubierto con chili con carne, queso, jalapeños y cebollas, recibió su orden y al morder la comida terminó con una pequeña bolsa de plástico llena de una sustancia blanca en polvo dentro de la boca.

La mujer contactó a las autoridades, quien después de un par de pruebas confirmaron que el polvo era cocaína. Por el hecho, Jeffery Davis Salazar, de 54 años, empleado del Sonic de San Pedro, fue arrestado.

Según el Daily Mail, Davis admitió que había comprado la cocaína en el estacionamiento del establecimiento, y que por error quedó en el pedido de la mujer. En las cámaras de seguridad del restaurante puede verse como en un momento el empleado enloqueció y comenzó a buscar frenéticamente algo.

Aunque la cocaína suele ser inhalada o inyectada, el consumirla vía oral puede ser igual de dañino para la salud, causando problemas cardiovasculares, cerebrales, gastrointestinales, renales y respiratorios a corto y largo plazo, además de ser una sustancia altamente adictiva.

El Departamento de Policía de Española arrestó al hombre, que afrontaría un cargo de delito grave por posesión de una sustancia controlada. Las autoridades agradecieron al restaurante por la rápida respuesta frente al caso, el cual puede significar "una potencial amenaza para la comunidad".

La mujer, representada por una firma de abogados, aseguró que esperan los resultados de las investigaciones para presentar un reclamo formal ante la compañía.

"Esto es tan repugnante, ¿qué hubiera pasado si un niño se lo hubiera tragado? Gracias a Dios que era un adulto y se sentía algo en la boca que no era comida", expresó una de las habitantes de Española en Facebook.

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