Kelsey Townsend, una madre de Wisconsin, Estados Unidos , dio a luz en coma inducido por COVID-19 . Tres meses después pudo al fin conocer a su pequeña hija.
Townsend tenía nueve meses de embarazo cuando fue diagnosticada con coronavirus, sin embargo su salud se vio deteriorada muy rápidamente. Tuvo que ingresar a un hospital y estar conectada a un ventilador.
El 4 de noviembre la madre estaba en coma inducido cuando dio a luz por cesárea a su pequeña Lucy.
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En diciembre, los médicos no tenían buenas noticias para el esposo de Kelsey, debido a que necesitaría un trasplante doble de pulmón.
Fue incluida en la lista de espera de trasplantes, aunque su condición comenzó a mejorar significativamente.
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Pasó 75 días conectada a una máquina, pero finalmente, la mujer abrió sus ojos. A mediados de enero, salió de la unidad de cuidados intensivos y le quitaron el ventilador.
El pasado 27 de enero, se fue a su casa y se reunió con su esposo ycuatro hijos, incluida su bebé que no conocía.
“Estoy muy agradecida de estar viva y bien y en casa con mi bebé, Lucy, y estar con nuestros otros hijos, Peyton, Beaux y Faith", manifestó Kelsey Townsend para ABC News.
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Un video del área medica de la Universidad de Wisconsin muestra el regreso de Kelsey a su hogar.
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