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Traicionar a Diana y amar a Camila: lo que muchos no le perdonan al ahora rey Carlos III

Fue protagonista de los primeros grandes escándalos de la monarquía de Isabel II. Ya en el trono, tiene la difícil tarea de conquistar a su pueblo.

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Al trono británico llega Carlos Felipe Arturo Jorge de Gales, rey Carlos III, quien no goza de la misma popularidad que su madre, la reina Isabel II. Algunos no lo consideran digno sucesor de la monarca fallecida este 8 de septiembre.

"Carlos no tiene la imagen más favorable y además ahora él va a tener que decidir cómo dentro de su familia se tratan los escándalos que han tocado tanto al príncipe Andrés como a varios miembros de la familia", dice Egoitz Gago, catedrático de la Universidad Javeriana.

Agrega que el rey Carlos III tendrá "un reinado de transición, en el cual va a ser continuista, va a seguir una cuestión muy cercana a la que tenía su madre, Isabel II, pero va a repararlo todo para el reinado que va a venir después”.

Uno de los grandes papeles que deberá tener es, evidentemente, congraciarse con la sociedad británica, que no le ve tan favorablemente como le ven a su madre”, añade.

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La popularidad del príncipe Carlos se vio opacada sobre todo con la llegada de Lady Di a la familia real, pues al ser una mujer sociable y empática, él pasó a un segundo plano en todos los eventos sociales a los que asistían.

Y “la muerte de Diana marcó un cambio en las emociones británicas. Los británicos son percibidos como reprimidos, reservados y poco expresivos, pero con Diana fue completamente diferente”, explica la historiadora Kate Williams.

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Muchos de sus súbditos no le perdonan su infidelidad y que tras el deceso de Lady Di se casara con su amante, la ahora reina consorte Camila.

Pero pese al escándalo, el rey Carlos III también es catalogado como un activista que en los nuevos tiempos genera mayor empatía entre el pueblo británico. Incluso, recientemente se le ha visto en eventos públicos despertando todo un fanatismo entre la multitud, sobre todo en mujeres.

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