Francia y Alemania se preparan para un nuevo confinamiento por el rebrote del coronavirus. India, el segundo país más afectado del mundo, superó ocho millones de casos con el temor de que se avecinen días peores a medida que se acerca el festival religioso de Diwali.
Después de temporadas de verano significativamente relajadas en Europa, los casos ahora están aumentando.
Es por eso que, a partir del viernes, Francia prohibirá que las personas abandonen sus hogares sin autorización; los bares y restaurantes permanecerán cerrados hasta al menos diciembre y los viajes entre regiones serán limitados, dijo el presidente Emmanuel Macron en un discurso televisado el miércoles.
"Como en otras partes de Europa, estamos abrumados por una segunda ola que probablemente será más difícil y mortal que la primera ", dijo Macron, aunque aseguró que este bloqueo sería menos severo que el primero.
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Las fábricas y los sitios de construcción permanecerán abiertos, al igual que las guarderías y las escuelas, aunque los niños de hasta 6 años deberán usar tapabocas.
En Alemania, la canciller Angela Merkel ordenó una ronda más leve de cierres desde el lunes 2 de noviembre hasta fin de mes.
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Las estancias en hoteles deben estar restringidas mientras el deporte profesional, incluido el fútbol de la Bundesliga, se llevará a cabo a puerta cerrada.
Merkel también advirtió contra la amenaza de "mentiras y desinformación, conspiración y odio" que están socavando la batalla global contra la pandemia.
Como en muchas partes del mundo, el país ha sido testigo de protestas de los escépticos del coronavirus , algunas de las cuales han estallado en violencia.
Otros estados europeos también están apretando los tornillos de la vida normal, con Irlanda bloqueada la semana pasada, mientras España e Italia impusieron toques de queda y restricciones de viaje.
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Sin embargo, a pesar del aumento de casos y muertes, el Reino Unido ha prometido persistir con su enfoque localizado en lugar de un bloqueo a nivel nacional.
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El secretario de Comunidades, Robert Jenrick, admitió que las estadísticas mostraban que Gran Bretaña estaba en un "mal lugar", con casi 25.000 nuevos casos registrados el miércoles.
Pero indicó que los ministros todavía creían que la acción selectiva era "el mejor camino a seguir" dadas las diferentes tasas de infección.
“Es hora de hacer un testamento”
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Una de las mayores preocupaciones de los gobiernos es el cansancio y la ira del público por los costos económicos, sociales y psicológicos de los cierres.
"Es un desastre, porque no puedo quedarme en casa, porque es difícil y quiero trabajar", dijo la esteticista parisina Irina.
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Los riesgos para la salud y el dolor económico han trastocado la vida diaria, desde la escolarización remota hasta el trabajo de oficina e incluso la planificación para la muerte misma.
En México, que tiene el cuarto número más alto de muertes por coronavirus con más de 90.000, la pandemia ha obligado a las personas a redactar testamentos que muchos aplazarían.
"Los mexicanos a menudo dejamos las cosas para mañana y no nos gusta hablar de testamentos. Es un mal augurio", dijo Laura Villa, trabajadora del sector financiero de 49 años y madre de dos hijos.
"La pandemia me hizo decidir que ahora es el momento de hacer un testamento", reconoció.
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En otras partes de América Latina, Argentina superó las 30.000 muertes y ambos países están por detrás de las casi 160.000 muertes de Brasil.
Halloween pandémico
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Estados Unidos todavía tiene el mayor número de muertes y recuento de infecciones en el mundo y, al igual que Europa, está luchando contra un nuevo pico con decenas de miles de nuevos casos diarios a medida que aumentan los temores de que los hospitales puedan verse abrumados.
Hubo más alarma cuando el FBI y otras dos agencias estadounidenses advirtieron sobre "una amenaza creciente e inminente de delitos cibernéticos" para los hospitales estadounidenses, incluidos los ataques de ransomware y la interrupción de los servicios.
Las agencias instaron a los hospitales a tomar precauciones, diciendo que tales ataques "serán particularmente desafiantes" debido a la pandemia.
El coronavirus ha ensombrecido las celebraciones de Halloween el 31 de octubre y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. advirtieron que podrían presentar un alto riesgo.
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Pero el pueblo de Croton-on-Hudson, al norte de la ciudad de Nueva York, todavía celebra su ‘Jack O'Lantern Blaze’ anual, donde más de 7.000 calabazas talladas a mano cobran vida para un espectáculo de luz y sonido.
"Estoy tan contenta de que esto haya sucedido este año para guardarles algo", dijo Sarah Nocerino, refiriéndose a sus hijas en edad escolar primaria.
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"Han tenido tanto que no pudieron hacer este año, fue bueno tener una tradición en la que todavía podemos participar para Halloween", remató.
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