Egipto condena a cinco años de cárcel a youtuber acusado de "insultar el islam"

Un tribunal de Egipto condenó este domingo a cinco años de cárcel al destacado youtuber Sherif Gaber, conocido por su contenido crítico con el islam, tras ser encontrado culpable de publicar vídeos que "desprecian la religión musulmana e incitan al ateísmo", indicó la corte en un comunicado.

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La demanda fue presentada por el abogado Al Haitham Hashem Saad, que acusó al influencer de "cometer un acto legalmente delictivo de insulto y desprecio a la religión" en base a los artículos 98, 160 y 161 del Código Penal egipcio.

Estas normas criminalizan la blasfemia, la "obstrucción" de rituales religiosos y la "imitación de un ritual religioso con la finalidad de ridiculizarlo", respectivamente.

El letrado indicó que el fallo del tribunal "representa el cumplimiento de los principios de la sociedad egipcia" después de que el acusado "insultara deliberadamente, a través de vídeos, a Dios y se burlara de la religión islámica".

Asimismo, sostuvo que Gaber se ha burlado "de todos los pilares de la religión" y ha negado la existencia del paraíso, el infierno, ha ridiculizado el día del juicio final con el objetivo de "dañar la unidad nacional y la paz social" de Egipto, un país de abrumadora mayoría musulmana.

Gaber, de 31 años, ya fue condenado en 2019 a tres años de cárcel por "denigrar el islam" y tras la emisión de la sentencia inició una campaña de recaudación para comprar una nacionalidad extranjera y abandonar Egipto, ya que las autoridades le impusieron una prohibición de viajar.

El egipcio, nacido musulmán pero desencantado con la religión, empezó a subir contenido a YouTube hace una década y ya acumula casi medio millón de subscriptores a su controvertido canal, donde sube vídeos cuestionando las enseñanzas del islam y denunciando lo que él considera malas prácticas promovidas por la religión.

En Egipto el ateísmo está perseguido y se han registrado varios casos de arrestos de personas que niegan la existencia de Dios, por lo que han sido acusados por el delito de ofensas religiosas.