Edmundo González ya está reunido con Javier Milei en la Casa Rosada de Buenos Aires

El opositor venezolano Edmundo González , quien reivindica la victoria en las elecciones de Venezuela, ya está reunido este sábado, 4 de enero de 2025, con el presidente argentino Javier Milei en Buenos Aires, donde cientos de venezolanos salieron a apoyarlo a días de la debatida asunción de Nicolás Maduro en Caracas. Edmundo González asegura que tomará posesión como presidente de Venezuela el viernes en lugar de Maduro.

Edmundo González, un diplomático de 75 años, arribó a la capital argentina con gran sigilo la noche del viernes desde Madrid, donde está exiliado desde septiembre, para iniciar una gira que lo llevará también a Uruguay este sábado, Panamá el miércoles y República Dominicana el jueves. Sobre él pesa una recompensa de 100.000 dólares que ofreció esta semana la policía científica venezolana por información que conduzca a su captura.

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Hay cientos de venezolanos apoyando a

Edmundo González

La Plaza de Mayo se transformó en un mar de banderas venezolanas, camisetas y gorras con los colores de la bandera nacional. Los participantes, que llegaron a lo largo de la mañana para apoyar a Edmundo González en su gira por la presidencia.

Con banderas y carteles como "Venezuela, no estás sola", cantaban "¡Libertad, libertad!" entre vendedores ambulantes de arepas, el tradicional pan de maíz de su país.

Luis Soto, un estudiante venezolano de 27 años que hace más de seis emigró a Argentina, llevaba un cartel que decía "Haga lo necesario, presidente". "Porque van a ser días complicados para salir de la tiranía que tenemos", dijo a la AFP. "No van a ser decisiones fáciles, pero que haga lo necesario, confiamos en él".

Edmundo González, exiliado en España desde septiembre de 2024, se prepara para continuar su gira por América Latina con el objetivo de movilizar apoyo internacional de cara a lo que considera una legitimidad en su victoria electoral. Mientras tanto, la situación política en Venezuela sigue siendo incierta, con un panorama altamente polarizado y con el futuro del país en juego.

La cita clave para Venezuela será el próximo 10 de enero, cuando Nicolás Maduro asumirá su nuevo mandato, que es ampliamente rechazado por la oposición y la comunidad internacional. La presión sobre el régimen de Maduro se intensifica, mientras los opositores buscan nuevas vías para restablecer la democracia en el país.

A pesar de las amenazas de captura por parte del régimen de Nicolás Maduro, que ha ofrecido una recompensa de 100.000 dólares por información sobre su paradero, Edmundo González sigue firme en su intención de asumir el cargo, argumentando que fue él quien realmente ganó las elecciones presidenciales celebradas en Venezuela el pasado 28 de julio.

Los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral (CNE), que proclamaron a Maduro como vencedor, han sido ampliamente cuestionados tanto por la oposición venezolana, encabezada por la Plataforma Unitaria Democrática, como por gran parte de la comunidad internacional.

El asilo político de Edmundo González

Edmundo González Urrutia fue el candidato unitario de la oposición en las elecciones del 28 de julio ante la proscripción de la líder opositora María Corina Machado. Se exilió en España tras ser acusado por la Fiscalía venezolana de "conspiración" y "asociación para delinquir".

Las autoridades electorales venezolanas proclamaron a Maduro reelegido para un tercer mandato consecutivo de seis años (2025-2031), sin publicar hasta el momento detalles del escrutinio, mientras la oposición denuncia un fraude y reivindica la victoria de Edmundo González con base en la publicación del 85% de las actas electorales en una web.

"Maduro jamás podrá mostrar ni un acta porque arrasamos en todo el país y lo saben", escribió Machado en la red X este sábado, al mostrar que según este conteo Edmundo González obtuvo 67% de los votos. Argentina desconoce la reelección de Maduro, al igual que Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina.

Su proclamación desató protestas que dejaron 28 muertos y unos 200 heridos, además de 2.400 detenidos. Tres de los arrestados murieron en prisión y cerca de 1.400 han sido puestos en libertad condicional.