Los esfuerzos internacionales continúan este jueves para llevar más ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, devastada por la guerra y donde hay riesgo de hambruna, según la ONU.
Tras el fracaso para alcanzar una tregua entre Israel y el movimiento palestino Hamás para el Ramadán, que comenzó el lunes, los combates continúan con al menos 69 muertes en las últimas 24 horas, según el Ministerio de Salud de Hamás, que administra el territorio palestino.
El hambre en Gaza ha cobrado la vida de niños. Los voluntarios en Rafah estaban revolviendo sopa en grandes ollas el miércoles 13 de marzo y ofreciendo comida a los palestinos desplazados que se reunieron alrededor, estirando las manos con contenedores vacíos en el tercer día del Ramadán. Se servía sopa de lentejas y arroz para el Iftar, la comida tradicional que se come al final del día durante el mes sagrado de ayuno musulmán del Ramadán.
"En años anteriores (durante el Ramadán) la gente estaba feliz, solía haber decoraciones, comida y bebidas, pero este año hay tristeza y desesperación. Tengo 60 años y nunca he tenido un Ramadán como este", dijo Adnan Sheikh al-Eid, voluntario repartiendo alimentos.
De otra parte, Hamás informó de más de 40 ataques aéreos en Gaza desde Beit Hanun, en el norte, hasta Rafah, en el sur, la ciudad donde la mayoría de la población está refugiada y que Israel amenaza con atacar por vía terrestre.
Publicidad
El buque "Open Arms", de la ONG española del mismo nombre, salió de Chipre el martes con unas 200 toneladas de ayuda alimentaria y se está acercando a la costa de Israel, según la web Marinetraffic. Se trata del primero que toma un nuevo corredor marítimo que permite llegar a Gaza.
El ministro de Exteriores de Chipre dijo que se está preparando un segundo barco más grande en el puerto de Lárnaca. El corredor marítimo que permite llevar ayuda se complementará con un muelle temporal frente a Gaza que construirán tropas estadounidenses, indicó la administración de Washington.
Publicidad
Los recientes lanzamientos de ayuda desde el aire de varios países "no son una alternativa" a las entregas terrestres, apuntan en un comunicado 25 organizaciones no gubernamentales, incluidas Amnistía Internacional y Oxfam.
Israel prometió "aniquilar" a Hamás tras el ataque del 7 de octubre, cuando comandos islamistas mataron a unas 1.160 personas, la mayoría civiles, según un recuento de la AFP a partir de datos oficiales israelíes. También secuestraron a unas 250 personas, 130 de las cuales siguen retenidas en Gaza, aunque Israel estima que 32 de ellas murieron.
Israel ha respondido con una intensa campaña de bombardeos y operaciones terrestres en Gaza que ha dejado al menos a 31.341 muertos, la mayoría civiles, según el Ministerio de Salud del territorio, de 2,4 millones de habitantes.
La principal agencia de ayuda de las Naciones Unidas en Gaza, la Unrwa, dijo el miércoles que un ataque israelí golpeó uno de sus almacenes de alimentos en Rafah, con el resultado de un muerto y una veintena de heridos.
El jefe de la Unrwa, Philippe Lazzarini, afirmó que el ataque "se produce cuando se están agotando los suministros de alimentos, el hambre es generalizada y, en algunas áreas, se está convirtiendo en hambruna".
Publicidad
"Isla humanitaria"
El barco de Open Arms partió de Chipre hacia Gaza el martes y remolca una barcaza con 200 toneladas de ayuda. Open Arms trabaja junto a la organización benéfica World Central Kitchen (WCK), del chef hispano-estadounidense José Andrés, que se encargará de la distribución de los alimentos.
Israel indicó por su parte que el barco "fue sometido a un control de seguridad exhaustivo y está acompañado por funcionarios israelíes para garantizar que solo la ayuda humanitaria llegue a la Franja de Gaza".
Publicidad
Junto a la orilla, en el norte de Gaza, ya hay personas esperando su llegada, entre ellos Eid Ayub. "Cuando llegue esta ayuda, no hay ninguna organización para distribuirla", recalcó, asegurando que los comerciantes se están aprovechando de la escasez.
Alrededor de 1,5 millones de palestinos están refugiados en la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja, junto a la frontera con Egipto, cerrada, y donde Israel amenaza con lanzar una ofensiva terrestre contra Hamás.
En este sentido el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, habló por primera vez el miércoles de "una isla humanitaria" donde según él podrían desplazarse los habitantes de Rafah.