La Policía Nacional española,
junto con la Policía Judicial de Portugal, ha desmantelado en Pontevedra, Galicia, el mayor laboratorio de Europa de procesamiento de pasta base de cocaína, capaz de producir diariamente para su consumo 200 kilos de droga, en una operación en la que han sido detenidas 18 personas que se encuentran ya en prisión.
Todas ellas formaban parte de una organización controlada por narcotraficantes de México y Colombia y eran los encargados de transformar la pasta base en clorhidrato de cocaína lista para su consumo desde una vivienda en Cerdedo-Cotobade (Pontevedra).
Esta “importantísima” operación, en palabras de Antonio Duarte, comisario jefe de la Brigada Central de Estupefacientes, ha permitido realizar la mayor aprehensión de pasta base en Europa -1.300 kilos-, además de abortar la puesta en el mercado de grandes cantidades de estupefaciente y de una contaminación ambiental “sin precedentes”, pues disponían de 27 toneladas de productos químicos que habrían sido vertidas a un río cercano al laboratorio.
Nueva tendencia: importar la pasta base para producir fuera de Colombia
Con esta operación, los investigadores han constatado una nueva tendencia en el tráfico de droga, en el que la sustancia estupefaciente es exportada sin haber sido sometida al proceso químico para su transformación en laboratorios asentados en Europa, lo que permite ahorrar costes a los carteles de la droga.
“Hay tanta producción de droga acumulada en Colombia
que las organizaciones tienen que darle salida de la mejor forma”, ha explicado Duarte antes de detallar que el tráfico de drogas a gran escala se ha extendido a países africanos, a Filipinas o Australia.
El macrolaboratorio destapado en Pontevedra podía cumplir a la perfección con este escenario, es decir, las organizaciones no asumen la producción en origen ni tampoco el traslado con los consiguientes costes y riesgos de que sea incautada en el transporte, ya que la cocaína se “fabrica” fuera de Colombia.
Primera producción de 6.000 kilos de cocaína
Pese a estar radicado en Galicia, el macrolaboratorio descubierto no estaba dirigido por ningún clan de narcotraficantes gallegos, sino por ciudadanos canarios, mexicanos y colombianos, todos conocidos por las fuerzas de seguridad por tráfico de drogas, que tenían ya todos los medios para poder sacar al mercado unos 6.000 kilos de cocaína.
Por un lado, los colombianos suministraban los medios humanos, es decir, los químicos del laboratorio, mientras que los mexicanos aportaban los conocimientos técnicos para la correcta extracción de la pasta base y los españoles se ocupaban de la logística que conllevaba gestionar el transporte de la sustancia desde Colombia a Pontevedra y su posterior distribución.
Los 18 detenidos han sido arrestados en Galicia (11), País Vasco (1), Madrid (4) y Las Palmas de Gran Canaria (2).
Pasta base oculta en máquinas de triturar piedra
Un total de 1.500 kilos de coca base llegaron hace unos meses desde Colombia al puerto portugués de Leixoes (Oporto) ocultos en máquinas de triturar piedra en el interior de dos cilindros mecánicos.
Para la importación, recurrieron a un empresario vasco que creó una empresa ad hoc con el objetivo de asegurar la entrada de la máquina sin problemas.
Fue el detonante de las pesquisas que los investigadores seguían desde octubre de 2022 sobre los miembros de una organización criminal asentada en las Palmas de Gran Canaria, que introducían grandes cantidades de cocaína y tenían contactos en Pontevedra y Madrid. Allí contaban con un chalet en Colmenar Viejo, donde almacenaban gran cantidad de productos químicos.
Las gestiones policiales permitieron concluir que detrás de los ciudadanos españoles se encontraban dos potentes organizaciones criminales -una colombiana y una mexicana- que se habían unido para poder financiar conjuntamente un laboratorio capaz de producir 6.000 kilos de clorhidrato de cocaína en distintas fases.
Tal era la capacidad de la organización que ya tenían intención de importar otras tres máquinas trituradoras con pasta base oculta en su interior.
Solo con una mínima parte de los 1.500 kilos de pasta base extraído de las dos primeras máquinas, las once personas que trabajan en el laboratorio -seis colombianos y cinco mexicanos- habían ya extraído listo para su consumo una primera partida de 150 kilos de cocaína.
Esta primera producción fue interceptada a mediados de marzo en un vehículo antes de entrar en la Comunidad de Madrid y fue la que “precipitó” el operativo policial simultáneo en las provincias donde se detuvo a los 18 miembros de la organización y realizaron 14 registros.
Como resultado de los mismos se han intervenido 151 kilos de sustancia estupefaciente terminada y lista para ser distribuida, 1.300 kilos de pasta base, más de 23.000 litros de precursores y 4 toneladas de productos químicos sólidos utilizados para procesar la droga.
Asimismo, incautaron la máquina trituradora de piedra, numeroso utillaje de laboratorio, documentación, teléfonos móviles, ordenadores y vehículos de alta gama. Por otra parte, los agentes bloquearon 17 propiedades - por un valor aproximado de 1.700.000 euros - y 37 productos financieros, a la espera de cuantificar el valor de los mismos.
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