Veintiún personas detenidas, entre ellas diecisiete ecuatorianas y cuatro colombianas, y cerca de una tonelada de cocaína incautada fue el resultado de una operación conjunta entre Ecuador
y Colombia para desarticular este jueves una estructura criminal que, según las autoridades, enviaba cocaína a carteles de México para su consumo en Estados Unidos.
La Fiscalía de Ecuador detalló a través de sus canales oficiales que las detenciones se realizaron durante una serie de 29 allanamientos simultáneos a inmuebles situados en las costeras provincias de Esmeraldas, Manabí y Guayas, cuya capital es Guayaquil, donde se encuentra el principal puerto de Ecuador.
En una rueda de prensa, el director nacional de la división de Antinarcóticos de la Policía Nacional de Ecuador, Pablo Ramírez, detalló que en los allanamientos también se decomisaron 940 kilos de cocaína y 6 armas de fuego, entre ellas un subfusil y una escopeta recortada.
También se incautaron de 56.000 dólares en efectivo, 5 teléfonos satelitales, 2 lanchas, 19 motores fuera de borda, 2 boyas satelitales, 5 vehículos, 65 teléfonos móviles y más de 5 millones de pesos colombianos.
Según la Policía, esta organización tenía vínculos con el Bloque Occidental Alfonso Cano de Segunda Marquetalia, una de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) conocida anteriormente como Frente Oliver Sinisterra.
De acuerdo con las investigaciones policiales, esta estructura dedicada al narcotráfico se dedicaba presuntamente a trasladar grandes cantidades de cocaína en las lanchas desde las costas ecuatorianas para entregarlas a carteles mexicanos.
Los destinatarios eran presuntamente el cartel del Pacífico o el de Sinaloa, quienes salían también a alta mar para recibir los cargamentos e introducirlos en su territorio.
Desde inicios de 2023 Ecuador ha incautado 135 toneladas de drogas, según destacó el lunes el comandante general de la Policía, Fausto Salinas, por lo que el país va camino por tercer año consecutivo de superar las 200 toneladas de drogas decomisadas.
Rodeado de Colombia y Perú, los dos mayores productores de cocaína del mundo, Ecuador se ha vuelto en los últimos años un punto clave dentro de la ruta del tráfico de esta droga, al aprovechar las mafias sus puertos marítimos para enviar grandes cantidades de esta droga a Europa y Norteamérica.
Esto, de acuerdo a las autoridades, es la principal causa del vertiginoso aumento de la violencia en Ecuador, que ha pasado en cinco años de 5,8 a 25,32 homicidios intencionales por cada 100.000 habitantes, la cifra más alta de su historia, concentrados principalmente en la zona de la costa por la que se mueve la ruta de la droga y donde están concentradas las bandas del crimen organizado.
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