En el contexto latinoamericano, caracterizado por su diversidad cultural e histórica, se resalta un país que ha alcanzado un acuerdo migratorio distintivo con Estados Unidos. Como es ampliamente conocido, la visa es un requisito para muchos viajeros que desean ingresar a la nación norteamericana.
En el caso de Latinoamérica, algunos destinos enfrentan dificultades para obtener este documento, pero solo uno tiene la ventaja de poder ingresar a Estados Unidos sin necesidad de poseer este requisito.
¿Cuál es el país que no necesita visa americana para ingresar a Estados Unidos?
Chile está situado en el extremo sur del continente y es el único en América Latina cuyos ciudadanos pueden disfrutar del privilegio de viajar a Estados Unidos sin la necesidad de una visa para estancias cortas de turismo o negocios.
Desde el 28 de febrero de 2014, Chile forma parte del Programa de Exención de Visa (VWP, por sus siglas en inglés), una iniciativa que permite a los ciudadanos de los países miembros visitar Estados Unidos hasta 90 días sin requerir una visa convencional.
Este privilegio es el resultado de una serie de criterios cumplidos por Chile, que incluyen estándares de seguridad en la emisión de pasaportes y un bajo índice de ciudadanos que permanecen en Estados Unidos más allá de su período de estancia permitido.
¿Qué requisitos necesitan los chilenos para viajar a Estados Unidos?
Aunque los chilenos están exentos de visa, deben obtener una autorización de viaje electrónica, ESTA, antes de su llegada a territorio estadounidense. Este permiso que se tramita en línea, tiene un costo menor que una visa y una duración de 2 años, además, es válido para múltiples entradas al país norteamericano.
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El acceso a este programa no solo refleja la confianza y la relación bilateral sólida entre Chile y Estados Unidos, sino que también facilita el intercambio cultural, turístico y comercial.
Sin embargo, los ciudadanos de Chile pueden viajar al país norteamericano cumpliendo todas las leyes migratorias durante su permanencia y respetando el tiempo de 90 días que es permitido. Además, no pueden trabajar ilegalmente y deben cumplir con los requisitos dados por las autoridades migratorias de la Unión Americana.