En medio de la situación que se vive en la isla tras elmagnicidio del presidente Jovenel Moise y la captura de connacionales por estos hechos, un colombiano en Haití, que trabaja allí desde hace tres meses, teme por las represalias que puedan tomar por ser de Colombia y pide que lo ayuden a salir de ese país.
- Lea también: Detalles exclusivos de la convocatoria para militares colombianos (r) que viajaron a Haití
Juan Diego Sepúlveda, un operador de maquinaria pesada, relató lo que está viviendo en la provincia de Hinche, en Haití, por el hecho de ser colombiano y blanco.
“Mi preocupación es que en cualquier momento se arme alguna trifulca en contra de los latinos y arremetan contra nosotros, personas de bien y de buen servicio”, señaló.
Por eso, este colombiano en Haití pide protección y ayuda para salir ante la compleja situación de orden público que cada día lo atemoriza más; así lo dio a conocer a través de un video en redes sociales.
Publicidad
“Por favor, que nos ayuden para poder salir de aquí, la situación es difícil, la situación es cruel, soy operador de maquinaria pesada vine acá únicamente para sacar adelante a mi familia”, manifestó el colombiano en Haití.
- Vea, además: Esposa de militar colombiano muerto en Haití dice que él viajó por una oportunidad laboral
Sepúlveda lleva tres meses trabajando entre Haití y República Dominicana, pero aseguró, que, tras el asesinato del presidente haitiano, sus días se han convertido en un infierno del cual quiere salir lo más pronto posible.
Publicidad
“La petición que hago para este gobierno es que nos saquen lo más rápido posible de este país y nos lleven a nuestro país porque la situación es difícil”, afirmó.
El ciudadano señaló que la Embajada colombiana ya lo contactó, pero le piden que se movilice hasta la frontera con República Dominicana, algo que para él es un riesgo.
Juan Diego Sepúlveda está a la espera de la gestión de las autoridades diplomáticas para poder regresar a Colombia.
Situación sociopolítica de Haití
Publicidad
La turbulencia social y política en Haití está lejos de disiparse. A cuatro días del magnicidio del presidente Jovenel Moise la incertidumbre impera en las calles.
Este sábado se tenía prevista la investidura del senador Joseph Lambert como presidente interino, pero la ceremonia se aplazó por petición misma del debilitado Congreso, que solo tiene 10 senadores en funciones.
Publicidad
Ocho de ellos lo designaron como un desafío al poder que asumió Claude Joseph, quien se ha desempeñado como primer ministro interino tras la muerte de Moise. Un mandato ilegítimo para sectores de la oposición.
“Lo consideramos como un usurpador que debería estar en la cárcel. Lo único que le interesa es el poder”, afirmó Antoine Rodon Bien-Aimé, presidente del partido opositor.
En medio del incierto panorama los partidos políticos siguen midiendo fuerzas de cara a las elecciones presidenciales y legislativas del 26 de septiembre.
“Esto significa que solo habría un periodo de dos meses y medio. Nuestro sistema electoral no está del todo preparado para lograr esta hazaña”, señaló Patrice Dumont, congresista.
Publicidad
El misterio sobre la muerte de Jovenel Moise ha incrementado las preocupaciones sobre la estabilidad y seguridad del país, sobre todo tras las declaraciones de uno de los cabecillas de las pandillas más poderosas de Haití.
“Pido a todos los grupos (pandillas) que se movilicen. Sal a la calle. Exigimos explicaciones sobre el asesinato del presidente”, dijo Jimmy Cherizier, miembro de pandilla haitiana.
Publicidad
Las autoridades avanzan en las investigaciones por el magnicidio y tratarán de esclarecer por qué ningún miembro del anillo de seguridad resultó herido en el hecho en el que Moise fue torturado y asesinado con 12 disparos.