Un día familiar resultó doloroso para una pequeña niña que iba por la calle con su madre, de la mano, mientras que su padre les tomaba un video.
En la escena apareció de repente un ciclista que tumbó a la niña y, en lugar de detenerse para ayudar u ofrecer disculpas, siguió su camino y escapó como si nada.
Esta secuencia ocurrió en Bélgica, a finales de 2020. El padre, ofuscado por el comportamiento del hombre en bicicleta, decidió compartir el video para que se hiciera viral y que el responsable respondiera, pues la niña tuvo que ser llevada a un chequeo médico por temor a una fractura.
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Como se dice popularmente, las redes “hicieron su magia” y los usuarios no solo identificaron al sujeto, sino que le empezaron a escribir desde insultos hasta amenazas. La situación llegó al punto de que el hombre llamó a los padres y les pidió retirar la denuncia.
La justicia tomó cartas en el asunto y decretó un castigo insólito y que ha dejado inconforme a más de uno. Aunque la actuación del biciusuario podía inclusive llevarlo tras las rejas, un juez decidió que debía dar un euro como compensación a la familia, según La Vanguardia .
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Dicha solución dejó mucha inconformidad, pero el togado explicó sus motivos. En primer lugar, aseguró que el hombre no tenía intención de embestir a la niña. De hecho, en juicio se defendió aseverando que empujó a la niña en una maniobra para no caer al suelo.
En segundo lugar, y la razón más importante para que la compensación económica fuera tan baja, fue que la cantidad de insultos y amenazas recibidas por el ciclista suponen un castigo suficiente para el hecho, de acuerdo con el funcionario.
En resumen, el juez consideró que el ciclista había recibido el escarmiento y que no había lugar para una sanción más fuerte.
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