Después de haber asistido a una reunión de algo más de media hora con un grupo de diputados, los servicios de rastreo británicos informaron a Boris Johnson que había estado en contacto con alguien al que diagnosticaron positivo de COVID-19 .
Se trata de Lee Ashfield, que tuvo síntomas días después y fue diagnosticado positivo.
"El primer ministro sigue las reglas y decidió aislarse", declaró en un comunicado el portavoz de Downing Street, que no precisó la duración de la cuarentena de Johnson, aunque según las reglas sanitarias británicas ésta debería ser de 14 días. Se encuentra "bien" y no tiene "ningún síntoma" de la enfermedad, e indicó que sigue trabajando, "sobre todo para liderar la respuesta del gobierno ante la pandemia del Coronavirus".
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Según el portavoz, Johnson ha previsto dirigirse a los británicos durante su cuarentena y también examinará con los servicios del Parlamento cómo podría intervenir a distancia en los debates parlamentarios.
El anuncio del aislamiento se produce al cabo de una semana agitada para el funcionario luego de la salida de dos de sus consejeros, entre ellos, Dominic Cummings, considerado el cerebro delBrexit .
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Además de seguir las difíciles negociaciones entre Londres y Bruselas por la salida de la Unión Europea, también está previsto que impulse nuevas medidas para hacer frente a las crisis sanitaria y económica y un plan para una "revolución industrial verde".
Con casi 52.000 muertos, Reino Unido es el país europeo con el mayor número de fallecidos por la pandemia y algunas de sus regiones, como Inglaterra o Gales, se encuentran confinadas por segunda vez.
En abril, Johnson estuvo gravemente enfermo tras haber contraído el COVID-19, incluso pasó una semana en un hospital en Londres y tres días en una unidad de cuidados intensivos.