Los servicios de emergencia atraparon este viernes una serpiente pitón de 7 metros de largo y 140 kilos que había ingerido una cabra entera en una granja en el estado de Kedah, en el norte de Malasia.
La Fuerza de Defensa Civil de Malasia explicó que aprovechó que la serpiente pitón estaba inmóvil haciendo la digestión para agarrarla. Sucedió en la aldea de Guar Batu Hitam.
El capitán Adenin Suhaimi, de la Fuerza de Defensa Civil en la provincia, indicó en un comunicado en Facebook que recibieron una llamada por la mañana alertando de la presencia de la serpiente pitón y tardaron unos 25 minutos en atrapar al reptil.
Un país tropical, Malasia alberga unas 160 especies de serpientes, incluida la pitón reticulada (Malayphython reticulatus), que es considerada la más larga del mundo, aunque la que alcanza más peso sería la anaconda, en el Caribe y Suramérica.
En 2016, los servicios de emergencia malasios atraparon una serpiente pitón reticulada de unos 8 metros de largo, considerándose entonces la mayor del mundo, aunque murió a los tres días.
Publicidad
Las pitones, así como las boas, suelen matar a sus presas mediante la constricción, apretando con su cuerpo, y las engullen de una pieza, lo que les puede llevar horas o incluso días para digerirlas.
Pitón de gran tamaño entra a vivienda y ataca a un hombre
De otro lado, una pitón de aproximadamente tres metros atacó e hirió a un adulto mayor, identificado como Rob Byrne. El hombre se encontraba en su invernadero cuando fue sorprendido por el reptil.
El ciudadano, residente en Bishopstoke, Inglaterra, le contó al medio The Mirror que la serpiente ingresó por una de las ventanas del lugar.
Publicidad
“Trató de morderme y enrollarse a mi alrededor. Sus colmillos me cortaron el brazo y me sacaron sangre mientras intentaba hundir sus dientes. Atrapó la parte posterior de mi brazo con un colmillo y el otro colmillo quedó atrapado en mi camiseta”, señaló Rob Byrne.
Asimismo, indicó que logró liberarse de la pitón tras empujarla. Sin embargo, esta casi logra inmovilizarlo en una esquina, fue entonces que entraron su esposa y su nieta, de tan solo dos años. Al parecer, el animal se asustó por el ruido y escapó.
El hombre tuvo que ser atendido por paramédicos debido a la gravedad de las heridas. Entretanto, este se mostró molesto por lo ocurrido, por lo que escribió al gobierno pidiendo mayores medidas sobre la tenencia de los reptiles.