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Además del asesinato de Fernando Villavicencio
, un hecho que muestra la delicada situación en Ecuador fue el asesinato el pasado 23 de julio del alcalde de Manta, Agustín Intriago
. Sicarios le dispararon en medio de un acto público, cuando visitaba unas obras de alcantarillado.
Agustín Intriago, alcalde de la tercera ciudad más grande de Ecuador, también había denunciado problemas de seguridad a raíz del narcotráfico, asegurando que se estaban viviendo tiempos muy difíciles y que la violencia había ganado terreno.
Después del atentado, las autoridades capturaron a dos de los presuntos sicarios, que resultaron heridos tras el ataque. Intriago, dicen allegados y conocidos, era un alcalde que trabajaba principalmente por el bienestar y la educación de los niños. En medio de su velación miles de seguidores lloraron y lamentaron su partida.
Rosita Saldarriaga, su esposa, el mismo día del fallecimiento del alcalde de Manta escribió en Twitter: “Agustín no hacía más que trabajar por Manta, con devoción y determinación absoluta. Quería que nuestros hijos y los hijos de Manta vivan en una mejor ciudad".
Al asesinado alcalde de Manta, las autoridades le habían reforzado su esquema de seguridad debido a que la Policía había evaluado su perfil y lo consideró de alto riesgo.
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Las autoridades ecuatorianas tienen 17 solicitudes más de protección de dirigentes de ese país quienes aducen problemas de seguridad por amenazas.
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