Dos hermanas en Estados Unidos fueron acusadas de intento de homicidio por propinarle 27 puñaladas a un guardia de seguridad en Chicago, quien les pidió que usaran tapabocas y desinfectante de manos en una tienda.
Según informaron medios locales, la víctima se encuentra estable. En medio del brutal ataque en su contra, el guardia logró retener a las jóvenes, entre los 18 y 21 años, hasta que llegó la Policía.
El hombre les pidió que se fueran de la tienda, pero las hermanas se negaron, comenzaron a grabarlo y luego lo golpearon.
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Una de ellas, identificada como Jessica Hill, habría sido quien lo apuñaló, mientras la otra joven, Jayla Hill, lo sujetaba del cabello, dijeron las autoridades.
El hombre sufrió heridas con arma blanca en el pecho, espalda, cuello y brazos, además de golpes en la cabeza y el cuerpo.
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El ataque, ocurrido el pasado domingo, quedó captado en cámaras de seguridad.
El abogado de las hermanas dice que lo sucedido no fue premeditado, pero la jueza Mary Marubio, del condado de Cook, declaró que el gran número de puñaladas es preocupante.
Las jóvenes fueron acusadas de intento de homicidio sin posibilidad de fianza. Su audiencia judicial está programada para el 4 de noviembre.