Raphael, único e irrepetible, no desea jubilarse y sigue cosechando éxitos

Tiene 75 años y canta desde los 4. Escribe su nombre con p y h para que lo puedan leer bien en cualquier idioma y prepara un nuevo trabajo musical. Tenía solo 10 años cuando su mamá le dio una bofetada por llegar a casa a las dos de la madrugada. “Empecé bien”, pensó en ese momento, pues llegaba del teatro y desde entonces, afirmó, no iba a dejar de ir a ese lugar. “Lo que mis padres hicieron por mí fue dejarme hacer”, reconoció el artista español, cuyo nombre real es Miguel Rafael Martos Sánchez. En seis décadas de carrera ha ganado 350 discos de oro, 50 de platino y uno de uranio, honor que solo comparte con Michael Jackson, ACDC y Queen. Ha grabado discos en español, italiano, inglés, francés, alemán y hasta japonés, donde llegó a ser número uno entre las listas de los más vendidos. Debutó con 18 años en el Madison Square Garden y fue comparado con Elvis Presley. En 2003 tuvo que someterse a un trasplante de hígado. “Tengo la edad que tiene el órgano”, acepta Raphael, que se negó por mucho tiempo a la cirugía. Después de 46 años de matrimonio, tres hijos y ocho nietos “estoy, como dicen en el lenguaje taurino, muy entero”. “Nunca se sabe”, dice al ser preguntado si alguna vez interpretaría reguetón, y es que, según él, “soy un artista que cada vez, cada día es diferente, porque soy único e irrepetible ese día”. “Estoy loco por cantar” es el nombre de su gira y “la gente está loca por escucharme”, afirma. Esto no es pecado, es un delito: lo que una víctima de pedofilia en Chile le dijo al papa En la miseria viven algunas de las 8,5 millones de víctimas del conflicto que esperan reparación Desde Miami, Raphael nos habló de sus mejores recuerdos en la música Raphael y su nueva producción musical con La Red Caracol