Tener una discapacidad intelectual es librar cada día una batalla en un mundo que les pone más trabas que oportunidades. Hasta la ley parece estar en su contra, pues existe una herramienta legal que permite despojarlos de su derecho más básico: el de elegir.
Con la interdicción estas personas no pueden tomar decisiones que van lo más simple como tener una cuenta bancaria hasta lo más importante como casarse o tener hijos.
Él es Alca, el rapero sin piernas que patina sin límites por la vida “¿Cómo no lo van a encontrar?”: se cumple un año de desaparición del ARA San Juan