Madre se hizo pasar por habitante de calle en Bogotá para buscar a su hija desaparecida

Nada más conmovedor que el coraje de una madre que lo arriesgó todo por encontrar a su hija. Los Informantes conoció en 2022, el testimonio de Nathalie Amaya, la mamá de la adolescente Lynda Michelle Amaya, de 15 años, quien desapareció misteriosamente en Bogotá, en noviembre de 2020.

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Con valentía, Nathalie Amaya emprendió una búsqueda incansable para encontrar a los responsables de la desaparición de su hija. Se adentró en los rincones más peligrosos de la capital disfrazada como habitante de calle.

Lynda Michelle Amaya fue secuestrada, torturada y asesinada por una banda de tráfico de drogas. Estuvo desaparecida por más de un mes. “Mucha frustración, ¿por qué así? ¿por qué ella? ¿por qué se ensañaron así con ella? Michelle luchó un montón. Finalmente, ellos la tiran de un tercer piso y ese golpe contundente es lo que le causa la muerte”, mencionó Nathalie Amaya, madre de la víctima.

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¿Qué ocurrió con Lynda Michelle Amaya?

Según las autoridades, la adolescente recorrió unos 20 kilómetros y llegó hasta el parque Tercer Milenio, donde la vieron por última vez. Había arribado a la zona con la intención de recuperar un celular que días antes le habían robado.

En su camino, se topó con unos criminales de la banda Tazmania, quienes acabaron quitándole la vida en el barrio San Bernardo.

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En medio de la desesperación, su mamá recorrió la zona del centro de Bogotá camuflada como habitante de calle. “Yo quería ser invisible, me puse sudadera rota, zapatos muy viejos, tal vez esos que duré mucho tiempo sin volver a usar. Los cartones aíslan un montón el frío, entonces yo tenía mis propios cartones porque voy a mirar y a observar. Empecé como a morirme en vida esos días”, reveló.

Nathalie Amaya pasó 28 días en la aterradora 'olla' que consumía en la indigencia a miles de personas, tanto adultos como niños, con la esperanza de encontrar a su hija. Sin saberlo, fue descubriendo cómo funcionaban las bandas de microtráfico, el secuestro de niños para luego convertirlos en mensajeros que llevaban y traían estupefacientes.

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Allí dio con los responsables del crimen de su hija, tras su testimonio, las autoridades ordenaron la captura de cinco de los integrantes de la banda Tazmania, temida organización que llevaba varios años dedicada al expendio de drogas en ese sector del centro de la capital.

Medicina Legal confirmó, un mes después, que el cadáver que estaba en la morgue era el de Lynda Michell Amaya. La madre de la víctima cuestionó por qué no le habían avisado a tiempo que ese cuerpo pertenecía a su hija.

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Aunque nada le devolverá la esperanza a esta madre, ella recuerda a su hija con todo el amor y alegría que ella aportaba a su familia. "Michell era un personaje inolvidable. Las personas que la conocieron coinciden en la magia que ella tenía", concluyó Nathalie Amaya.

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