En Colombia siguen reclutando niños para la guerra. Con la firma de los acuerdos de paz con las FARC, había la esperanza de que esta práctica macabra de los grupos armados terminara, pero no. No ha sido así. Con las disidencias y ELN, que nunca ha dejado de reclutar, las cifras se dispararon y son escandalosas. En el norte del Cauca, por ejemplo, se están llevando niños desde los 12 años. Con camuflado y fusil, pero sin ninguna preparación, los mandan al frente de batalla a que les pongan el pecho a las balas. El destino de los niños convertidos en carne de cañón.
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Al norte del Cauca los acuerdos de paz no llegaron y la guerra no da tregua. Los grupos guerrilleros buscan mano de obra barata e ingenua para que defiendan con su vida su ‘proyecto político’ y el negocio del narcotráfico. Niños embaucados con promesas falsas que se van de sus casas detrás de los cantos de sirena y un supuesto mejor futuro, pero terminan de camuflado cargando un fusil más grande que ellos y en el frente de batalla. Los Informantes fue hasta Toribio, Cauca y visitó hogares rotos. Habló con unos padres desesperados que siguen buscándolos, porque el amor es más fuerte que el miedo.