Se necesita mucho coraje para asumir la identidad de género en Colombia. En la comunidad Embera ser homosexual o transexual es un delito grave. Los Informantes conoció en el 2022 a Pamela Carupia, una mujer que transformó su resguardo y de paso se convirtió en un referente de la moda y el arte gracias a su trabajo.
“Yo me siento una mujer atrapada en un cuerpo de hombre, digámoslo así. A los 13 años empecé a revelar mi identidad como lo que soy yo y empezó como un alboroto ahí”, recordó sobre cómo ‘nació’ Pamela.
Ella, quien pertenece a la comunidad Embera Chamí, sabe que decir algo así en muchos de resguardos de su etnia podría significarle años de castigo o incluso el destierro, pero no tiene ni una pizca de miedo porque encontró en el arte la forma de abrirse camino en medio de la adversidad.
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“Muy difícil el ser trans dentro de un resguardo, porque eso es como un pecado, un delito para el cabildo”, aseguró Carupia.
Ser transexual en muchos resguardos de los Embera es algo así como un delito que se paga caro. Ella habla con propiedad de hasta dónde puede llegar el castigo para quien, como ella, decide expresar abiertamente su orientación sexual:
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"Las fuerzan a trabajar 6, 8, 9 años. A veces las castigan de una forma muy cruel que las amarran a un palo y las dejan a agua y sol por tres días, el castigo más terrible para mí sería salir del resguardo”, señaló.
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En la lengua del pueblo Embera la palabra transgénero no tiene una traducción, muchos en sus comunidades les dicen wërapara, una palabra que ofende profundamente a Pamela. “Significa en español mujer falsa, por esa razón yo peleo con esa palabra”.
Hacer un collar Embera toma días, exige paciencia y precisión para tejer las chaquiras con cuidado, cada color tiene un significado. La paciencia y la perseverancia que aprendió en su niñez le ayudaron a enfrentarse a un mundo machista donde la diversidad no era una opción.
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Lidera grupo de mujeres transexuales
A pesar del rechazo, a los 13 años cambió su nombre por Pamela, a los 14 se vistió por primera vez de mujer y salió a caminar por las calles de su resguardo. A los 16 entró al equipo masculino de fútbol y soñaba con ser gobernadora de la comunidad.
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Pamela hizo historia al convertirse en líder de su comunidad: la primera mujer transexual que ocuparía un cargo de gobierno en su resguardo. Ella es la artífice de que nunca más alguien fuera agredido por su orientación sexual.
"Hoy por hoy ya somos un grupo que ya somos como cualquier persona del resguardo, que podemos aportar”, afirmó con orgullo.
Trabajando en los cafetales conoció a muchas mujeres trans desterradas de sus comunidades. Aunque dentro y fuera de los territorios indígenas la población LGBTI está en riego, Pamela se siente segura en su resguardo Karmata Rúa, donde lidera el grupo de mujeres transexuales de la comunidad. “Nos protegemos la una a la otra”, señaló.
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Pamela dejó a un lado el café y se dedica al arte Embera, collares y accesorios que han llegado incluso a pasarelas en Europa, formas de expresar su sensibilidad y conservar la tradición que aprendió de su abuela.
En diciembre de 2022, Pamela Carupia recibió la condecoración de Antioqueña de Oro en la categoría de arte y cultura, gracias a su liderazgo y contribuciones a su comunidad.
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Ahora, sueña con llevar el arte Embera a lugares donde nunca llegó. Trabaja todos los días para eso y no va a parar. No importa los obstáculos que el destino le ponga por delante.
Reviva el capítulo competo de Los Informantes aquí: