Elkin Susa fue el gerente de la Caja Agraria en Chaguaní, Cundinamarca, hasta que la ambición lo llevó a financiar el robo más grande de la historia a una entidad financiera. Él fue uno de los cerebros detrás del robo de $24.072 millones del Banco de la República en Valledupar.
En viajes, joyas, carros y licor se gastaron los ladrones. La fortuna se les esfumó y parte del dinero se recuperó gracias a la extinción de dominio. Marco Emilio Zabala, gerente de la sucursal del banco, perdió su empleo y terminó en la cárcel a pesar de él no tuvo nada que ver.