En una pequeña habitación en EE. UU., así vive expolicía que denunció la Comunidad del anillo

Ányelo Palacios, exoficial de la Policía Nacional, denunció en 2014 la existencia de una red de prostitución dentro de la institución. Este escándalo, conocido como la ‘Comunidad del anillo’, le acarreó diversos problemas, entre ellos la destitución y amenazas. Los Informantes conoció lo qué ha pasado con su vida y reveló detalles sobre lo sucedido.

Tras su denuncia, tuvo que colgar su uniforme y salir de Colombia de manera irregular. Radicado en Estados Unidos desde hace dos años, ha intentado rehacer su vida, según reveló, luego de huir del país por las constantes amenazas.

(Lea también: Comunidad del anillo: desde el exilio, el hombre que hizo las denuncias habla con Los Informantes)

“¿En qué momento usted dice me voy del país?’ Las amenazas vía telefónica, que te paren en un semáforo y te digan ‘te vamos a matar, te vamos a secuestrar’; entonces yo digo ‘Dios mío, yo qué hago, para dónde cojo’”, dijo, y añadió que, las oportunidades laborales eran escasas debido a su situación.

Ányelo Palacios fue destituido después de que aseguró que le abrieron “una cantidad de procesos disciplinarios y penales”. Además, afirmó que era él “contra una institución de poder político”, por lo que no le quedó otra opción que abandonar el país.

Abusos dentro de la Policía

Ányelo Palacios nació en el seno de una familia humilde, pero aseguró que siempre estuvo marcada por el abuso. Desde joven, supo que su sueño era ingresar a la carrera de oficial. A los 16 años, pagó los primeros semestres en la escuela con préstamos que hizo su mamá. No obstante, mencionó que al poco tiempo de ingresar a la institución, empezó a vivir una tragedia.

“Cuando yo llegué a la Policía Nacional era un joven, un niño, mi primera experiencia sexual fue el abuso de más de cinco personas en una noche. Ya iba a cumplir 17 años”, relató Ányelo, quien aseguró que al interior de la institución había una “red delincuencial”.

(Lea también: Policía que denunció la comunidad del anillo tuvo cambio extremo de vida: le tocó huir a EE. UU.)

El exoficial aseguró que el principal culpable de su calvario en la policía fue el coronel Jair Castellanos Soto, quien tenía influencia con políticos de la época y, según él, reclutaba a cadetes de escasos recursos para ofrecerlos a diferentes personalidades a través de un catálogo.

Contó que fueron muchos años de abusos a los que se vio sometido como cadete y que no cesaron cuando continuó su carrera como oficial. Además, dijo que faltaban muchos nombres por revelar, pero que las autoridades tienen sus declaraciones.

Una nueva vida en Estados Unidos

Fuera de la Policía Nacional y con pocas oportunidades laborales, decidió buscar el sueño americano, pero no le fue fácil. “En Cancún, un grupo de personas me recogió en México, y allí pasé casi cinco días en una situación tenaz”.

Ányelo aseguró que un grupo lo tuvo detenido y que, para poder continuar, tuvo que pagar más de 30 millones de pesos. Finalmente, después de casi dos meses, obtuvo una respuesta positiva a su solicitud de asilo.

(Lea también: La historia desconocida de la mujer que le reclama a Banrepública: ¿es la del billete de $10.000?)

Vive en un barrio humilde en Orlando, donde alquiló un cuarto en una casa que comparte con otros 10 migrantes. Hace carreras de Uber en un carro que compró con mucho esfuerzo y trabaja en una oficina que ayuda a los latinos a comprar sus primeras propiedades.

En su habitación, se aferra a su familia a través de las fotografías que tiene en su pequeño espacio y no hay día en el que no se comunique con ellos, porque su dolor más grande es estar lejos de su hogar.

“Algún día que yo sienta en mi corazón que tenga que hablar más, lo hago. No le tengo miedo a nadie. Ya lo hice en su momento y lo vuelvo a hacer”, concluyó Ányelo, quien dejó claro que aún faltan muchas verdades por conocerse.

Reviva la historia completa de Los Informantes aquí: