En parejas masculinas no solo son los más estables, sino quizás los más exitosos y no en temas del amor o sí, en amor al tenis . Robert Farah y Juan Sebastián Cabal son los mejores tenistas de dobles de Colombia y lograron, además de otras hazañas, poner al país que poco sabe de tenis a hablar de raquetas, de pelotas y a esperar el match point de un partido. Los Informantes se les metió a la cancha.
“No lo registraba bien la verdad, o sea, no lo puedo creer que ganamos Wimbledon, o sea, si había un Grand Slam que menos pensaba que podía ganar en la vida era Wimbledon… No lo podía creer y hasta el sol de hoy tampoco lo puedo creer, pero igual ese torneo es impresionante, es increíble”. No era una Copa Mundial de Fútbol, era Wimbledon, el sagrado césped del tenis, el torneo más importante del mundo, el más grande, el más legendario y la pareja de tenis más ganadora de Colombia celebraba la gloria de ser campeones. Es muy difícil que alguien haga lo mismo que Juan Sebastián Cabal y Robert Farah ese día, por algo les dicen el Colombian Power.
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“La vida te quita y te da en el deporte y ese día nos quiso dar”. Los reyes del tenis colombiano ya sabían lo que era ganar torneos, pero Wimbledon, la catedral del tenis mundial era otra cosa. El 13 de julio del 2019 la gente prendió el radio, sacó televisores y armaron pantallas gigantes para verlos jugar. Ese día todos fuimos Farah y Cabal.
“Eso fue el momento más emotivo, más fuerte, la cereza, la cúspide de tantas, miles de horas de trabajo”, así recuerda el momento don Patrick Farah, el papá de Robert y su primer entrenador. Llegó a Colombia huyendo de la guerra del Líbano, todavía habla con acento y se emociona al recordar ese partido: “es un momento que se graba para toda la vida”. Ganaron, celebraron, los recibieron como héroes en Colombia y se consagraron como los mejores tenistas en pareja de Colombia y el mundo, un título que defendieron al ganar el US Open, su segundo Grand Slam, en el mismo año.
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“¿Qué tal ese año? Como carrera fue el mejor obviamente, o sea, ni cerca de llegarse a comparar. Lastimosamente después del 2020 ya sabemos todo lo que llegó, nos cortaron el embrión por así decirlo, veníamos jugando y haciendo las cosas muy bien y ya el 2020 pues ya lo que sufrió el mundo y ahí ya comienza otra historia, pero ese 19 quedará y es el mejor año y marcado la historia para nosotros y para el tenis colombiano”.