En diciembre de 2011, Sergio Mogollón fue víctima de un ataque con ácido en el barrio Castilla, en Bogotá, cuando un delincuente lo agredió para robarle su celular a pocas cuadras de su casa. Los Informantes conoció su historia y lo que pasó con su caso.
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Las quemaduras le dejaron el 97% de su cara afectada, principalmente sus ojos y nariz. “Los párpados me los reconstruyen con tejido de la oreja, pero tuvieron que hacerlo dos veces porque el primero no funcionó”, afirmó.
Para ese año, los ataques con ácido eran más frecuentes que ahora, y Colombia era uno de los países con mayor número de ataques del mundo, seguido de Pakistán y Bangladesh. El incidente que le ocurrió a Mogollón le dividió su vida en un antes y después.
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“Ojalá fuera como un carro que se estrelló, le compré las piezas, lo armé, lo enderecé y lo puse a andar, pero en Medicina influye mucho la cicatrización, los tejidos y, lastimosamente, yo tengo tendencia a cicatrizar queloide, entonces a mí me pueden poner un injerto y puede no pegar”, mencionó.
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Impunidad para el caso de ataque con ácido
Sin embargo, la falta de justicia en su caso es algo que lo marcó de por vida, pues ni las autoridades ni ninguna otra institución investigó los hechos ocurridos esa noche, tampoco se identificó el agresor. “No sé, debe estar durmiendo, nunca pasó nada... yo ni siquiera sé qué tipo de ácido fue, porque ni siquiera fueron capaces de investigar eso”, aseguró.
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Aunque parece no importarle, realmente ha sido resiliente y, por eso, tras el ataque encontró un nuevo propósito de vida. “Yo hoy en día digo que a mí el ataque con ácido fue lo mejor que me pudo haber pasado porque en esa época teníamos ideas de proyectos, pero nos daba mucho miedo”, recordó Mogollón, quien ahora es dueño de un taller de autos de alta gama junto a su esposa María.
Sergio, de 35 años, dijo que esa noche del incidente hizo lo que nunca había hecho. “Uno se bajaba del Transmilenio y quedaba el CAI de la Policía y baja uno derecho y llegaba a mi casa y a dos cuadras del CAI, a dos cuadras de mi casa. Ahí fue donde ocurrió todo”.
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La Ley 1773 de 2016 estableció penas más severas para los ataques con ácido en Colombia. Según cifras de Medicina Legal, en 2024 se han registrado 70 casos de ataques con ácido, y solo en Bogotá van 19. Este sigue siendo un tema en el que se debe priorizar la investigación, para que los casos de otras víctimas no queden en la impunidad.
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