Calaya ha sido cuidada y consentida por Melba Brown en el zoológico y es que aunque no es el mundo ideal el cautiverio sí es el más seguro para estas especies que, por la crueldad del hombre, están en vía de extinción.
Brown, además, preparó con una dedicación exclusiva e infinito amor a Calaya para la maternidad, pues así como a las mamás humanas, las gorilas no se escapan a una depresión posparto y posible rechazo del bebé.
Actualmente, la población cautiva es de 354 gorilas (con Moke) en zoológicos de Norte América.
Publicidad
“Mi vida no tiene rutina”, dice Gianluca Vacchi Bazuco, lo que usan varios recolectores de café como gasolina para hacer su trabajo El extraño síndrome que hace que el cáncer se reproduzca en Johana Rojas “Lo mejor de la vida es estudiar:” Claudio Melo, bachiller a los 91 años