La compañía Singapore Airlines le reembolsó el dinero a la pareja de Gill y Warren Press, que viajaron en primera clase junto a un perro que “se tiró gases” durante un vuelo de 13 horas,
informó el medio Insider.
De acuerdo con los afectados que recibieron la compensación, escucharon que un pasajero viajaba con su mascota porque volar lo asustaba. Sin embargo, el animal incomodó a la pareja porque, además de las flatulencias, también babeó a Warren cuando se ubicó bajo su asiento.
Al quejarse con la azafata, la mujer les dijo que lo único que podía ofrecerles era un par de asientos en clase económica, algo que tuvieron que aceptar.
Tras quejarse por el incidente con el perro y contactarse con Singapore Airlines, la compañía les ofreció una disculpa y les giró dos cheques por 73 dólares, lo que a Gill le pareció injusto por lo que tuvieron que pagar para viajar en primera clase y finalmente tener que pasarse a clase turista.
Un mes después, la empresa le emitió a la pareja dos vales de viaje por valor de 118 dólares cada uno, lo que todavía no cubría lo que pagó por el vuelo.
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Ante la insistencia de los afectados por el perro, la aerolínea decidió finalmente, “como gesto de buena voluntad”, darles un reembolso a Gill y Warren de 1.410 dólares, informó el medio Insider.
“Es lo menos que podían hacer. Si hubieran querido ser realmente amables podrían habernos dado mucho más”, declaró la mujer.
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Asimismo, afirmaron que decidieron donar el dinero a la organización Blind Low Vision NZ, que proporciona perros guía a personas ciegas o con poca visión.
“Lo principal no era el dinero, en realidad se trataba de responsabilizar a la gente”, sostuvo Gill.
La compañía señaló en un comunicado que "Singapore Airlines se esfuerza por notificar a los clientes que pueden estar sentados junto a un perro de asistencia antes de abordar el vuelo. Nos disculpamos sinceramente porque esto no ocurrió en este caso y trabajaremos con nuestros equipos del aeropuerto para garantizar que esto no vuelva a ocurrir en el futuro. En circunstancias en las que los clientes sentados junto a un perro de asistencia soliciten ser trasladados, Singapore Airlines ayudará a reubicar a los clientes dentro de la misma cabina cuando el espacio lo permita”.