El papa Francisco recibió la visita de Noemi Staiano, una niña que fue alcanzada por una bala disparada en medio de un ajuste de cuentas entre dos escuadras de la mafia napolitana, unas de las más peligrosas bandas de narcos del mundo.
Noemi fue herida gravemente en mayo de 2019, cuando tenía 4 años, y ha tenido que ser sometida a tres cirugías -dos de pulmón y una de la columna-, dijeron sus padres aVatinan News .
Tras salvarse, la pequeña anhelaba cumplir el sueño de abrazar al Santo Padre.
Por eso, sus papás, Tania Esposito y Stefano Staiano buscaron hacerlo a través del arzobispo de Nápoles, ciudad en la que viven. Pero la pandemia retrasó todos sus planes.
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Luego, el sueño de Noemi, que estudia en un colegio de monjas, fue posible gracias a monseñor Domenico Battaglia, el arzobispo napolitano, a quien la familia agradeció.
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‘Ángel de la guarda’
Los papás de Noemi consideran que el que la pequeña esté con vida es un milagro y en gratitud hacia Dios, querían el encuentro con el papa Francisco.
Minutos antes de que este sucediera, según contó Vatican News, ‘Don Mimmo’, como le dicen cariñosamente al arzobispo Battaglia, le preguntó a Noemi qué oraciones quería hacer junto al Papa, a lo que ella respondió que el ‘Ángel de la guarda’ y el ‘Ave María’.
Noemi deberá ser sometida a varias cirugías más, para tratar de recomponer su columna, pero según sus padres, tendrá que vivir hasta los 18 años con un torso que le ayuda a mantener la postura.
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Acerca de si perdona a los mafiosos que hirieron a su hija, los Staiano dicen que no lo han hecho porque los responsables ni siquiera han presentado disculpas, pero, como familia cristiana, lo harán.
En la jornada, destacó el medio vaticano, la niña le regaló al Santo Padre una estatuilla de él mismo, algo que lo conmovió.
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