Una montaña rusa de emociones, así podría definirse el viaje que una joven realizó para visitar a su abuela antes de contraer matrimonio.
Shelby Hoefling es una escritora de 32 años que, desde su infancia, le decía a su abuela Nanny que ambas llegarían de la mano el día de su boda.
Lamentablemente, Nanny, de 98 años, enfermó, y Shelby, honrando a su más grande amiga y mentora, decidió viajar miles de kilómetros antes de su matrimonio, para que fuera su abuela la primera en verla vestida de novia.
Cada segundo de este encuentro lo valió todo para Shelby, pues, recargada de ternura y sabiduría, la novia regresó a casa para hacer realidad su día soñado.
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Fue así como Shelby y su entonces prometido se juraron amor eterno. Eso sí, con una bendición previa, la de la abuela Nanny a su pequeña nieta.
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