En marzo de 2020 una mujer de Reino Unido adoptó a Bud, un loro hembra que no podía volar debido a su sobrepeso. Los gramos de más los ganó a punta de paquetes de papa, a los que era adicta.
Chloe Shorten lo llevó a su casa porque sus antiguos dueños ya no podían mantenerla. Se la entregaron con un peso de 620 gramos, unos 200 gramos más del peso normal.
Esta condición provocaba que Bud no pudiera volar y cada que lo intentaba terminaba en el suelo.
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Según Metro , el plumífero escuchaba a kilómetros cuando alguien destapaba un paquete de papas.
La situación fue controlada por la nueva dueña del ave, que se esmeró principalmente en que no hubiera papas fritas cerca.
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La medida funcionó y Bud, el loro de 22 años, volvió a volar.
A massive 👏🏻 for Bud the parrot. She lost over half her body weight on a diet after becoming addicted to.... crisps.
— Rob Butler (@BobRutler) January 28, 2021
Great story. pic.twitter.com/bkbffId6Vh