Un duro momento pasó Kayley Stead el día de su boda, tras enterarse que su prometido no se iba a casar con ella. Sin embargo, decidió continuar con la fiesta de todos modos, pues había gastado sus ahorros en el matrimonio.
La pareja decidió comprometerse en 2020, luego de una relación de cuatro años, y desde ese momento iniciaron los preparativos para la boda en Swansea, Reino Unido.
Un día antes de la ceremonia, Kayley, de 27 años, estuvo con las damas de honor en un apartamento alquilado, mientras el novio estuvo con sus padrinos. Ambos habían acordado no hablar antes de la boda, por lo que no supo de él hasta el otro día.
En la mañana siguiente, ella se levantó temprano y comenzó a arreglarse, pero uno de los padrinos la llamó para decirle que el novio se había ido y que no estaría en la ceremonia.
- Puede ver: Pareja debió posponer su boda por tratamiento de cáncer: “Los invitados nos pidieron un reembolso”
Pese a la difícil noticia, ella decidió secarse las lágrimas y continuar con la fiesta, pues gastó 12.000 libras (más de 58 millones de pesos colombianos) en los preparativos para el matrimonio, según informó The Sun.
“Fue un shock absoluto, no tenía indicios de que iba a hacer esto, pero ver a mis hijas angustiadas también me hizo querer cambiar el día. No quería recordar el día como una completa tristeza”, declaró Kayley para el programa matutino británico This Morning.
Publicidad
Al final, ella disfrutó de las fiesta y disfrutó con sus familiares el amargo momento. Tras conocer su historia, varias personas le enviaron mensajes de apoyo, recibió donaciones para costear los gastos
de la boda y hasta le regalaron un viaje.