Hay momentos en la vida que parecen de película y este es uno de ellos. Su protagonista: un lagarto carroñero asiático que sorprendió con su “visita” a clientes y empleados de un supermercado en Tailandia.
El gigante de dos metros escaló como un montañista la estantería de los jugos.
¿Qué buscaba? Disfrutar de la unidad de aire acondicionado, ubicada encima de la estantería.
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Uno de los trabajadores del lugar tuvo que llamar a la Policía y esta, a su vez, a cazadores de reptiles para capturarlo y devolverlo a su hábitat.
Eso sí, quedó debiendo todo lo que destrozó.
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A monitor lizard .... looking for food
— Science girl (@gunsnrosesgirl3) April 7, 2021
restaurants and street food stands being closed has possibly reduced the amount of scraps that the reptiles can forage forcing them into urban areas to look for food pic.twitter.com/ELj7xWAqeW