El Boletín de Científicos Atómicos revelará la hora del Reloj del Fin del Mundo
el próximo martes 28 de enero de 2025. Este cronómetro también es conocido como el Reloj del Juicio Final y simbólicamente representa la proximidad de la humanidad a una catástrofe global con el apocalipsis.
La hora en el Reloj del Fin del Mundo se ajusta anualmente, reflejando las amenazas actuales que enfrenta el planeta, tales como el riesgo nuclear, el cambio climático y otras tecnologías disruptivas.
Para la actualización de la hora de este año, el Comité de Ciencia y Seguridad del Boletín (SASB) tendrá en cuenta varias amenazas globales, entre las que se destacan las tecnologías disruptivas como la inteligencia artificial, la guerra entre Rusia y Ucrania, los bombardeos entre Israel y Hamás, e Israel y Hezbolá y la crisis climática que continúa deteriorándose.
Las manecillas del reloj están a 90 segundos de marcar la medianoche -conocida como la hora del fin del mundo-. En los últimos tres años había permanecido a 100 segundos de la medianoche, por lo que esta sería la ocasión en la que más cerca ha estado de marcar el apocalipsis.
De acuerdo con Rachel Bronson, presidenta y directora ejecutiva del Boletín, cada segundo que el reloj marque más cerca de la medianoche es una señal urgente de que se deben efectuar cambios inmediatos en cada una de las crisis expuestas.
¿Cómo se creó el Reloj del Fin del Mundo?
El Boletín de Científicos Atómicos fue fundado en 1945 por Albert Einstein y otros científicos que participaron en el Proyecto Manhattan, el programa de investigación y desarrollo que produjo las primeras armas nucleares durante la Segunda Guerra Mundial. En 1947, estos científicos introdujeron el Reloj del Fin del Mundo como una forma de advertir al público y a los líderes mundiales sobre los peligros de las armas nucleares y otras amenazas globales.
Cada año, la Junta de Ciencia y Seguridad del Boletín de Científicos Atómicos, que incluye a expertos en diversas disciplinas, evalúa el estado del mundo y decide si mover las manecillas del reloj más cerca o más lejos de la medianoche. Este proceso se basa en una evaluación rigurosa de eventos y tendencias globales.
En enero del año pasado, el Boletín de Científicos Atómicos ajustó el Reloj del Fin del Mundo a 90 segundos para la medianoche, el punto más cercano al apocalipsis desde su creación. Este incremento refleja un momento de peligro sin precedentes, impulsado por una combinación de factores que incluyen la guerra en Ucrania, la proliferación de armas nucleares, el cambio climático y la desinformación.