La pandemia por coronavirus obligó a muchas personas a retornar a sus ciudades de origen, como le ocurrió a Oluwageorge Johnson, un estudiante londinense de 20 años.
Volvió en marzo a Enfield, su tierra natal, y dejó sola su residencia estudiantil en Nottingham. Cinco meses después recibió una llamada de los administradores, quienes le contaron que habían ingresado a la habitación al escuchar extraños ruidos.
No se trataba de ladrones, pero sí de una invasión de palomas que llenaron toda la habitación de excremento. Algo definido por los cuidadores como "una escena de película de terror" que incluía hasta un polluelo y varios huevos, manifestó Mirror .
El propio Johnson aceptó que todo había sido su culpa, pues dejó una ventana abierta, razón por la que los invasores plumíferos se adueñaron del sitio y arruinaron la mayoría de las pertenencias con su excremento.
Fotos feitas pelos funcionários da universidade mostram o apartamento do estudante Oluwageorge Johnson, em Nottingham, destruído após ter sido invadido por pombos.https://t.co/zKeWJFtG0e
— 🫡 Márcio Nóbrega 🇧🇷 (@marcionobrega) September 3, 2020
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