Una de las características de los arhuacos, uno de los cuatro pueblos indígenas que habitan la Sierra Nevada de Santa Marta, en el norte del país, es la unidad de su gobierno. La elección del Cabildo Gobernador es un cuidadoso proceso de consenso y participación de la comunidad. Las 60 comunidades del pueblo arhuaco deliberan y votan por un candidato, pero allí no termina su proceso de selección. Los mamos se reúnen luego en las Kankurwas donde realizan las consultas espirituales sobre el que puede ser el futuro gobernador. Cada candidato debe cumplir cuatro etapas espirituales, previa a la elección; además, demostrar un estricto cumplimiento de los usos y costumbres del resguardo.
La elección del último gobernador provocó una profunda división entre el pueblo arhuaco. Esta es la historia.
Cuando estábamos en pleno confinamiento ocasionado por la pandemia causada por el COVID-19, en agosto de 2020, fue elegido como Cabildo Gobernador el señor Zarwawiko Torres, pero según los mamos, máximas autoridades espirituales y del gobierno arhuaco, su elección fue irregular porque no votó la mayoría de los cabildos, solo 19 de los 60 asentamientos. Desde entonces, la división es total. Leonor Zalabata, consejera mayor del pueblo arhuaco, dice que más grave que la irregular elección del gobernador Zarwawiko es la intromisión del Ministerio del Interior que avaló dicha elección, provocando una división interna que, lejos de resolverse, es cada vez más profunda.
La consejera afirma: "La situación del pueblo arhuaco no es un problema interno entre mamos o entre comunidades o entre liderazgos, es un problema que originó el Ministerio del Interior con un acto administrativo, que profundizó, que consolidó algunas diferencias políticas que había entre nosotros".
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Para ella, la cartera tomó partido y destruyó la unidad del pueblo arhuaco. El abogado y doctor en Sociología Jurídica de la Universidad Nacional, Rosembert Ariza, que ha estudiado la vida de los arhuacos por años, considera que lo que busca el gobierno es implementar una estrategia de división interna entre los indígenas.
"La mejor forma de lograr que esta tierra y todo este proyecto de autonomía indígena y de respeto al territorio esté en función de un gobierno o un proyecto económico estatal es dividirlo y la mejor forma es enfrentarlo entre ellos", sostiene.
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Ante una tutela instaurada por sectores opuestos al señor Zarwawiko, la Corte Constitucional dictó medidas cautelares mediante el auto 149 de 2022, mientras resuelve el problema de fondo. El alto tribunal suspendió lo provisionalmente como gobernador y, a la vez, ordenó respetar la autonomía del pueblo arhuaco y que ellos mismos resuelvan sus conflictos.
El Ministerio del Interior emitió la resolución 039 del 7 de abril de 2022 donde acata la decisión de la Corte de revocarle el mandato a Zarwawiko, pero solo en el papel, dice la consejera Zalabata.
"Mientras los tribunales y la Corte Constitucional toman unas decisiones, pues no las implementan y no las cumplen. Por el otro lado, sí siguen las instituciones dándole participación a la contraparte de los manos, a la contraparte de nosotros, y yo creo que eso lo que hace es negarnos el derecho, no existe una inversión en las comunidades que no están de acuerdo con la certificación que ha hecho el Ministerio del Interior, no tenemos garantías de derechos", expresa.
Una nueva elección desconocida por los mamos
En las primeras semanas de mayo, Zarwawiko convocó al pueblo arhuaco para definir la legalidad de su elección. Según él, la mayoría de las comunidades se dieron cita y lo ratificaron como Cabildo Gobernador, pero los mamos opositores dijeron que fueron suplantados y su representación no fue real, así que rechazaron las decisiones tomadas en esa reunión.
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Hablamos con el gobernador Zarwawiko, que defendió su elección y aseguró que todas las Kankurwas -grupos de mamos facultados para realizar la elección- participaron, incluidas Seykúmake y Numa’ka, donde están los mamos opositores.
"Hubo la participación de los mamos de esas Kankurwas, esto no quiere decir que porque algún mamo identificado no vaya se desconozca a la Kankurwas", afirmó.
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La división ha provocado muchos problemas de gobernabilidad al pueblo arhuaco, pero lo más complejo es que las reclamaciones pasaron de las palabras a los hechos. Hace poco se conocieron unas imágenes que muestran una batalla campal en Nabusimake, su capital. Allí, miembros de uno y otro bando se enfrentaron a golpes, algo inusual en un pueblo pacífico que siempre ha resuelto sus problemas mediante el diálogo.
A los mamos les preocupa que las profundas diferencias entre sus miembros puedan acabar con la cultura y la existencia de este pueblo que siempre se ha caracterizado por la unidad. Precisamente, la consejera Leonor Zalabata piensa que es una estrategia del gobierno para debilitar la unidad que se ha opuesto a los proyectos de minería, agroindustriales y turísticos dentro de la línea negra, territorio sagrado concedido por el gobierno a los cuatro pueblos de la Sierra Nevada, una forma de debilitar la consulta previa y sus posturas frente a estos proyectos de desarrollo.