Sin ninguna necesidad de ello y con Palmer como tirador designado, con nueve de nueve penaltis anotados esta temporada, Madueke y Jackson aprovecharon que el '10' se dolía en el suelo del pisotón para pelear por quién debía tirar el penalti.
Madueke se aferró a la pelota y Jackson se lo recriminó, hasta el punto de que fue Conor Gallagher, el capitán, el que le quitó el balón a Madueke y se lo dio a Palmer. De no ser por la intervención del capitán, Madueke se hubiera encarado a Jackson. Hizo, incluso, un par de amagos de volver a ir a por el delantero africano, una vez que los ánimos parecían más templados.
El abrazo que se dieron, una vez Palmer marcó e hizo su póker, fue poco más que forzado.
¡INSÓLITO! Palmer quiere su póker, pero Madueke se metió y se peleó con todos por el penal... ¡También estaba Jackson!
— SportsCenter (@SC_ESPN) April 15, 2024
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Luego de todo lo sucedido, Mauricio Pochettino se mostró descontento por la reacción de los jugadores en campo, afirmando que espera no vuelva a suceder esto de ninguna manera. “Palmer es el lanzador de penales. No volverá a pasar, no podemos volver a comportarnos como niños. Es una pena. Les dije a los jugadores que esta es la última vez que aceptaré este tipo de comportamiento. Esto no es una broma", dijo el estratega argentino.
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Cole Palmer y una noche 'mágica' con los 'blues'
Cole Palmer ya está en la pelea por la Bota de Oro de la Premier League. El inglés anotó un póker en la aplastante victoria del Chelsea ante el Everton (6-0) y demostró que es de los jugadores más determinantes en la liga, a la altura de los veinte goles queErling Haaland lleva esta temporada.
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Palmer, a sus 21 años, echó un pulso a Pep Guardiola la temporada pasada y pidió más minutos. Se vio preparado para ello y para dar un paso adelante. No quería esperar su oportunidad en el banquillo y pasar años entrando y saliendo del equipo, como Phil Foden. Quería ser titular ya, y por eso se marchó en verano.
El Chelsea pagó 60 millones por él y no fue una locura. Ha quedado demostrado que fue hasta barato y que si este equipo tiene alguna razón para sonreír es por él.
En otra exhibición, Palmer metió un 'hat trick' perfecto en media hora, tras un gol con la zurda, uno con la cabeza y otro con la diestra. Marcó un tanto de penalti en la segunda parte y, junto a un buen gol de Nico Jackson, comandó la goleada del Everton.