En el 2010, John Wall deslumbró a todo el mundo de la NBA y fue elegido como el número 1 en el Draft del 2010 por los Washington Wizards. En sus primeras temporadas como profesional mostró un nivel alto, que lo llevaron a ganarse un contrato millonario y pasó a ser uno de los basquetbolistas mejores pagados.
Sin embargo, desde el 2017 su vida cambió. Las lesiones aparecieron y lo alejaron de las canchas. Problemas crónicos en su rodilla y un desgarro en el tendón de Aquiles lo condenaron a no jugar por un largo tiempo.
Cinco años después, parece que la situación ha cambiado y hoy, en Los Ángeles Clippers, espera tener un buen presente y brillar en la NBA nuevamente, junto a otras estrellas como Kawhi Leonard o Paul George.
En una charla con 'Salvation Army of Wake County', el base contó un duro relato sobre la situación que ha vivido en los últimos años. Sus palabras fueron muy duras.
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"Es el lugar más oscuro en el que he estado. Quiero decir… Llegué a pensar en suicidarme. Me desgarré el tendón de Aquiles, mi madre estaba enferma y acabó falleciendo, mi abuela falleció un año después… y todo esto mientras lidiaba con el COVID. Fui a quimioterapia con mi madre, la vi dar su último aliento sin poder cambiarse de ropa durante días mientras la acompañaba en el sofá", reveló.
"Si puedo superar esto, puedo superar cualquier cosa en la vida… Quiero volver a estar en la cima y ver que los aficionados todavía quieren que juegue… El apoyo de mi ciudad natal y el de todos ha significado mucho. En ese camino tuve que buscar un terapeuta; ya sabes, mucha gente piensa: ‘No necesito ayuda. Puedo superarlo en cualquier momento’. Pero tienes que ser fiel a ti mismo y descubrir qué es lo mejor para ti. Yo lo hice", agregó.
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Cabe recordar que otros jugadores de la NBA como DeMar DeRozan o Kevin Love también han reconocido sufrir problemas de salud mental.