Rafael Nadal tiene una nueva oportunidad de cortar una racha negativa en finales del Abierto de Australia. El tenista español ha perdido las últimas cuatro que ha jugado y no quiere igualar el récord maldito de Andy Murray, que ha caído en cinco oportunidades en el Rod Laver Arena.
Nadal no tiene el mejor historial en el Grand Slam australiano. A pesar de que logró conquistarlo en su quinta participación, en una recordada final a cinco sets contra Roger Federer (7-5/3-6/7-6/3-6/6-2) en el 2009, lleva 12 años sin poder levantar el trofeo.
Después de ese triunfo contra el suizo, no supo concretar cuatro finales, la primera de ellas en el 2012.
En ese año, Nadal derrotó a Federer en la semifinal; mientras que Novak Djokovic batalló durante cinco sets para deshacerse de Murray. La final también se tuvo que definir en un quinto parcial, en el cual 'Nole' consiguió un quiebre definitivo para hacerse con el trofeo (5-7/6-4/6-2/6-7/7-5).
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El de Manacor volvió a la máxima cita dos años después. En la semifinal volvió a eliminar a Federer, esta vez en sets corridos. Esa final la jugó contra otro suizo, Stanislas Wawrinka, quien pudo vengar a su compatriota. Nadal, que llegó como el primer preclasificado, fue sorprendido por su rival, que aparecía en la octava posición de la lista. Después de cuatro sets, 6-3/6-2/3-6/6-3, 'Stan' levantó su primer trofeo mayor.
Pasaron tres años, hasta que el nombre del español volvió a figurar en la final del torneo de Melbourne. Australia vivió ese año una de las finales más emocionantes de todos los tiempos. Después de ocho años Nadal y Federer se reencontraban en el Rod Laver Arena. Esta vez quien se llevó el trofeo a la casa fue el suizo. El espectáculo, que duró 3 horas y 38 minutos, se definió después de cinco sets (6-4/3-6/6-173-6/6-3). 'Rafa' volvía a irse con las manos vacías de Melbourne.
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En el 2019, a Nadal se le presentó la oportunidad de vengarse de 'Nole', quien había desatado esta mala racha. El español llegó a la final sin haber perdido un solo set y había demostrado un gran nivel a lo largo del torneo. Sin embargo, el serbio jugó un tenis superlativo y no le dio ni la más mínima opción al español, a quien derrotó en sets corridos.
Este año, 'La Fiera' tiene la gran chance de revertir la historia y levantar su segundo trofeo del Abierto de Australia. Al frente tiene a uno de los mejores jugadores de pista dura del mundo, quien se estará jugando el primer puesto del ranking ATP. ¿Será esta la final que corte la racha negativa del tenista español?