La kazaja Elena Rybakina (N.6 del mundo) conquistó este sábado el torneo WTA 1.000 de Roma
luego del abandono al inicio del segundo set de la final de la ucraniana Anhelina Kalinina.
Rybakina se había apuntado el primer set 6-4 y ganaba 1 juego a 0 en el segundo cuando la ucraniana, autora de un recorrido sorprendente sobre la tierra batida romana, se sentó en la silla y llamó al médico.
Lesionada en el muslo izquierdo, según la WTA, finalmente renunció, entre lágrimas, y fue a saludar a Rybakina, que sucede en el palmarés a la polaca Iga Swiatek.
Rybakina, ganadora de Wimbledon el año pasado y finalista del Abierto de Australia en enero, conquistó el quinto título de su carrera, su segundo del año después de coronarse en Indian Wells contra Sabalenka. Así pues, pasa a figurar por méritos propios entre las favoritas a Roland Garros, que da comienzo en una semana.
Para imponerse en Roma, se benefició de dos abandonos de sus rivales, Kalinina y anteriormente de Swiatek en cuartos de final.
En la final, que comenzó a las 23h00 locales debido a la larga interrupción de más de cuatro horas por la lluvia de la semifinal masculina, la kazaja comenzó a un ritmo suave.
Tras perder el servicio de inicio, fue mejorando y su mayor potencia le sirvió para apuntarse el primer set.
A pesar de su derrota, Anhelina Kalinina, 47ª del mundo, logrará la mejor clasificación de su carrera, luego de este inesperado recorrido en Roma. En principio será 25ª del mundo en la próxima clasificación WTA.
Más allá del resultado, al final, en medio de la entrega de los premios, se vivió un incómodo momento para las dos tenistas, pues no sabían a quién darle los reconocimientos y todo en medio de los abucheos de los aficionados. Sin duda alguna, una pésima experiencia para ambas tenistas.
Vea la confusión en la premiación del WTA 1.000 de Roma:
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