Andrey Rublev, el nuevo perjudicado en el Masters 1.000 de Roma

Después de Rafael Nadal el sábado y de Novak Djokovic el domingo, el Masters 1.000 de Roma perdió este lunes a otra de sus cabezas de serie, Andrey Rublev, 6º del mundo, sorprendido por el francés Alexandre Müller.Reciente vencedor del Masters 1.000 de Madrid, el ruso se inclinó 3-6, 6-3, 6-2 ante el 109º del mundo.Rublev parecía, sin embargo, tener la situación bajo control después de un primer set cerrado en 33 minutos, pero perdió pie al inicio del segundo.Müller, de 27 años y cuyo mejor resultado era una final perdida en el torneo ATP 250 de Marrakech en 2023, realizó ajustes tácticos que desarmaron a su rival.El galo, que nunca había derrotado a un tenista del top-10 mundial en cinco intentos, firmó la victoria de más prestigio de su carrera con un 'ace' en su tercera bola de partido.En octavos de final, se enfrentará el martes al chileno Nicolás Jarry (24º), un especialista de la tierra batida que superó al italiano Stefano Napolitano (125º) 6-2, 4-6, 6-4.El vigente campeón, el ruso Daniil Medvedev (4º), sufrió ante el serbio Hamad Medjedovic (121º), aunque terminó venciendo 7-6 (7/5), 2-6, 7-5. Cara y cruz de argentinos El argentino Sebastián Báez (19º) logró una meritoria victoria para meterse en octavos ante el danés Holger Rune (12º) por 2-6, 6-2, 6-3. El próximo rival de Báez será el polaco Hubert Hurkacz (9º), verdugo del también argentino Tomás Etcheverry (28º) 7-6 (9/7), 6-2.El otro finalista en el Masters 1.000 de Madrid, el canadiense Félix Auger-Aliassime (20º), también tuvo que hacer sus maletas, eliminado por el australiano Alex De Miñaur (11º) 6-7 (2/7), 6-4, 6-4.El australiano se enfrentará en octavos con el griego Stefanos Tsitsipas, N.8 del mundo, vencedor ante el británico Cameron Norrie (30º) 6-2, 7-6 (7/1).En el cuadro femenino, la española Paula Badosa, exnúmero 2 mundial y actualmente N.126, cayó en los octavos del WTA 1.000 de Roma ante la estadounidense Coco Gauff (N.3) por 5-7, 6-4 y 6-1.A pesar de su derrota, Badosa se va de la capital italiana con muy buenas sensaciones, tras casi un año sin competir con continuidad debido a las lesiones, a dos semanas de Roland Garros (26 mayo-9 junio).