Aunque le dirige desde hace ocho temporadas, el entrenador de los Golden State Warriors, Steve Kerr, se mostró impresionado por la actuación de Stephen Curry en la victoria del domingo ante los Celtics en el segundo partido de las Finales de NBA.
Curry rompió la igualdad en el marcador en un devastador tercer cuarto de los Warriors (35-14) en el que anotó 14 de sus 29 puntos y tres de sus cinco triples.
La magia y los lanzamientos imposibles del base allanaron el camino para el contundente triunfo 107-88 de los Warriors con el que igualaron 1-1 la eliminatoria, pero también brilló en el aspecto defensivo, con tres robos.
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"Steph estuvo impresionante en ese cuarto", reconoció Kerr ante periodistas en el Chase Center de San Francisco (California). "No solo en el tiro, sino en el esfuerzo defensivo. No se le reconoce lo suficiente por su nivel de preparación, físico y defensa".
A sus 34 años, Curry (1,88 metros de altura y 84 kilos) Curry llegó a ser señalado durante su carrera por ser "demasiado bajo" para triunfar en la NBA, un prejuicio que el base se esforzó en desmentir fortaleciendo su físico a la vez que explotaba su descomunal talento.
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"La diferencia en la fuerza y el físico de Steph ahora con respecto a hace ocho años, cuando llegué aquí, es bastante espectacular", señaló Kerr. "El tipo es increíble. Sigue trabajando en su juego, en su fuerza, en su preparación año tras año, y es un placer verle jugar cada noche".
Con tres anillos de campeón y reconocido como el mejor tirador de la historia, Curry recalcó el domingo que la clave de sus éxitos son la actitud y capacidad de trabajo.
"He trabajado mucho en eso", explicó. "Desde mi año de novato hasta ahora todo ha girado alrededor del esfuerzo y el cuidado... Si te esfuerzas, las cosas buenas sucederán. Y seguirás mejorando".
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