En la Selección Colombia hubo preocupación desde el minuto 54 por la salud de Richard Ríos, quien quedó tendido en la cancha y el árbitro César Ramos dejó seguir el encuentro, a pesar de las claras señas de dolor del mediocampista. Eso generó rabia en James Rodríguez .
El capitán y '10' de la ‘tricolor’ no dudó en reclamarle al juez central por darle continuidad al juego pese a que el antioqueño estaba lesionado.
Las palabras y la actitud de James Rodríguez con el árbitro mexicano César Ramos fue fuerte y el colegiado le sacó tarjeta amarilla al ‘10’ de la Selección Colombia.