Rigoberto Urán, entre los recuerdos, su medalla y el récord a batir en los Juegos Olímpicos

Rigoberto Urán tiene decidido que intentará competir en los Juegos Olímpicos de París 2024. Si lo consigue, estos serían sus quintos Juegos y le harían escribir una nueva página de récords en la historia de Colombia en los Juegos Olímpicos.

Primero, porque se convertiría en el primer deportista colombiano en la historia en competir en cinco ediciones consecutivas de los Juegos Olímpicos (2008-2024), independientemente del deporte.

Segundo, porque igualaría a los dos corredores que ostentan el récord de participaciones olímpicas en ciclismo en ruta masculino, con cinco: Murilo Fischer (Brasil) y Alejandro Valverde (España).

“Lo vamos a intentar. Quiero correr un par de años más y retirarnos. Todavía me gusta montar en bicicleta. Obviamente tengo el apoyo de la familia, que es superimportante, porque al fin y al cabo somos un equipo.

Lo más importante es que todavía mi esposa me da esa oportunidad. Por eso lo hago y por eso disfrutamos de esto y la idea es esa, correr los Juegos Olímpicos de 2024 en París“, explica Rigoberto Urán, que acaba de finalizar su décimo Tour de Francia, en una entrevista para Olympics.com.

Urán, que cuenta con una medalla de plata en su haber en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, de hecho, cree que incluso podría aspirar a finalizar su recorrido olímpico con una nueva presea.

“La de los Juegos Olímpicos es una carrera muy especial porque pasa de todo. La medalla de Londres era una medalla con la que no contaba nadie, ni siquiera en Colombia, porque era un recorrido plano [Urán tiene perfil de escalador]. Al conseguirla, aprendí que esas son carreras en las que puede pasar de todo: simplemente tienes que ir con la ilusión, con las ganas y con la actitud de hacerlo bien”, asegura.

Rigoberto Urán y la plata en Londres 2012

Su medalla de plata de Londres 2012 estuvo a punto de ser de oro. Después de una escapada de más de 20 corredores durante la carrera, a falta menos de 10 kilómetros solo dos ciclistas pudieron romper el grupo: Urán y un Aleksandr Vinokúrov que ya sabía lo que era subir al podio olímpico (plata en Sídney 2000).

El oro de Londres 2012 se disputó al esprint, y en eso el ciclista de Kazajistán era experto; en Londres, letal.

Pero a pesar de estar tan cerca del oro olímpico, Rigoberto Urán no resta ni un ápice de importancia a su plata, la primera medalla para un latino en este deporte y la única hasta el momento para un colombiano en ciclismo en ruta.

“Era una escapada de 25 o 26 corredores, y estaba con nosotros (Fabian) Cancellara, que era el favorito. Atrás venían los británicos con Mark Cavendish persiguiendo. Y ellos normalmente siempre te cogen. Lo que pasó fue la definición de qué son los Juegos Olímpicos: puede pasar de todo. Por eso hay que ir a disfrutar”.

“Los Juegos Olímpicos son especiales”

Sin embargo, para Urán los Juegos Olímpicos van más allá de las medallas. Los Juegos Olímpicos van de compartir; van de personas.

“Cuando uno se junta con su selección lo pasa muy, muy bueno. Es un ambiente muy bacano, muy familiar, porque estás con tus compañeros, con tus compatriotas. Todo es muy, muy, muy agradable, muy bacano y se disfruta mucho”, recuerda.

Además de los compañeros de selección, los Juegos Olímpicos le han permitido a Urán acercarse a otros deportes y atletas.

“Los Juegos Olímpicos son especiales pues que compartes con muchos deportistas. En la Villa Olímpica el compromiso es muy grande y lo compartes con otra gente”, describe.

En la Villa Olímpica, Urán también ha llegado a vivir su propio ‘momento fan’ al cruzarse con superestrellas del deporte como Usain Bolt.

“Lo vi, pero soy tímido para ir a pedir fotos. Hay deportistas que te dan curiosidad porque son muy grandes, ricos… y de pronto los ves con su bandeja haciendo la fila para comer y eso te dice que somos todos iguales. Realmente somos deportistas y en la Villa Olímpica no importa el deporte, la medalla, lo que hagas, pues somos todos seres humanos”, reflexiona Urán.

“En los Juegos, después de competir, estuve casi una semana viendo otros deportes. Y es una maravilla. Como espectador es algo muy bacano”, concluyó el experimentado pedalista colombiano.