Neymar, atacante de la selección brasileña y del Al Hilal saudí, dijo ya estar concentrado en su recuperación, tras haber sido sometido este jueves a una exitosa operación en la rodilla izquierda para tratar las lesiones que sufrió en un partido de Brasil con Uruguay por las eliminatorias mundialistas.
"Salió todo bien. Gracias por los mensajes y ahora concentrado en la recuperación", afirmó el delantero de 31 años en un mensaje que publicó en su cuenta en Instagram junto con una fotografía en la que aparece en la cama del hospital en que fue operado.
Neymar fue sometido a un procedimiento quirúrgico para la corrección de sus lesiones en la rodilla izquierda en el que se le reconstruyó el ligamento cruzado anterior y se le repararon los meniscos, explicó Rodrigo Lasmar, jefe del equipo médico de la selección brasileña y responsable por la intervención.
Lasmar dijo que los médicos quedaron muy satisfechos con los resultados de la exitosa operación y que ya iniciaron los planes para la rehabilitación del futbolista con fisioterapia.
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Pese a que el médico no dio detalles, los especialistas consideran que su recuperación puede exigir cerca de ocho meses, lo que amenaza su participación en la Copa América de 2024.
El exjugador del Barcelona y del PSG fue operado dos semanas después de la lesión fortuita que sufrió poco antes de terminar el primer tiempo del partido del 17 de octubre en que Brasil perdió por 1-0 en su visita a Uruguay por la cuarta jornada de las eliminatorias sudamericanas.
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El brasileño, que no ocultó las lágrimas por la lesión, tuvo que ser retirado de la cancha en una camilla y abandonar el estadio con la ayuda de muletas.
En caso de que se confirme que estará de baja por ocho meses, será el mayor período de inactividad del futbolista de 31 años, por encima de los seis meses en que estuvo alejado de las canchas este año, entre febrero y agosto, tras ser operado en el tobillo.
La ruptura del ligamento cruzado anterior y del menisco se une a la serie de lesiones que el mundialista ha sufrido desde 2020 y que lo han dejado alejado de las canchas al menos 400 días.