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Neozelandés bate récord mundial al saltar 941 veces de "puenting" en un día: ¡Una locura!

El 'Puenting' es una de las actividades deportivas más extremas del mundo y un hombre no se la pensó dos veces al momento de hacer historia con una marca difícil de superar.

Hombre haciendo 'Puenting'.
Hombre haciendo 'Puenting'.
Omer Messinger/Getty Images

El neozelandés Mike Heard batió este miércoles un récord mundial al saltar 941 veces de "puenting" en un solo día desde un puente en la ciudad neozelandesa de Auckland con el fin de recaudar fondos para fines caritativos.

La hazaña de Heard, que fue retransmitida en directo por la compañía de "puenting" AJ Hackett Bungy NZ, batió el récord hasta la fecha de 765 saltos que el francés François-Marie Dibon consiguió en junio de 2022.

El neozelandés recaudó más de 8.600 dólares neozelandeses (unos 5.100 dólares o 4.800 euros) que donará a la Fundación de Salud Mental de Nueva Zelanda.

Heard indicó a la televisión estatal TVNZ que quería batir el récord de "puenting", ya que -aseguró- fue Nueva Zelanda el país donde nació esta modalidad deportiva.

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"Estoy muy motivado y me conforta tener detrás a la Fundación Mental de Nueva Zelanda. Tenemos un problema en este país y quiero ayudar a sacarlo a la luz y que los neozelandeses hablen de ello", dijo en referencia a las enfermedades mentales.

¿Qué es el 'Puenting'?

El puenting, también conocido como 'bungee jumping', es una emocionante actividad de aventura que consiste en saltar desde un puente, plataforma o estructura elevada con una cuerda elástica atada a los tobillos. El principio fundamental del puenting implica que, después de la caída libre desde la altura, la cuerda se estira y rebota, deteniendo la caída antes de que la persona alcance el suelo. Esta experiencia extrema ofrece una combinación única de adrenalina, emoción y liberación de endorfinas que atrae a amantes de la aventura de todo el mundo.

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El puenting se originó en las islas del Pacífico Sur, pero se popularizó en la década de 1980 en Nueva Zelanda. Desde entonces, se ha extendido a numerosos destinos de todo el mundo, con puentes, acantilados y grúas utilizados como plataformas de salto. Aunque es una actividad emocionante, es fundamental que se realice bajo la supervisión de profesionales y siguiendo rigurosas medidas de seguridad para garantizar la integridad de los participantes. El puenting es una experiencia única y una manera emocionante de superar miedos personales y disfrutar de la sensación de flotar en el aire antes de la liberación del elástico.

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