Mundial de Rugby: Nueva Zelanda y Sudáfrica, una rivalidad con historia
Todo listo para el partido definitivo del Mundial de Rugby, que en esta ocasión enfrentará a Nueva Zelanda y Sudáfrica en un duelo que tiene historia y promete muchas emociones.
Acción de juego de partido entre Nueva Zelanda y Sudáfrica.
En París, capital del país de la alta cocina, se verán las caras el sábado los dos grandes chefs del rugby, Nueva Zelanda y Sudáfrica, un duelo de cuatro estrellas con la recompensa para el vencedor de convertirse en el primer tetracampeón de la historia.
All Blacks, campeones en 1987, 2011 y 2015, o Springboks, vencedores en 1995, 2007 y 2019, ¿cuál de estas dos potencias levantará la Copa Webb Ellis en el Stade de France y ocupará el trono del rugby?
Tras siete semanas de competición, sudafricanos y neozelandeses, números 1 y 2 de la clasificación de World Rugby, se enfrentan por el título después de dos trayectorias caóticas, pero paralelas.
Un camino de campeón para un equipo que hace unos meses estaba cerca de la implosión, calificado como "los All Blacks más débiles de la historia" antes de la cita mundialista y humillado por Sudáfrica (35-7) durante la preparación del torneo.
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All Blacks, equipo de Nueva Zelanda, en el Rugby Championship
AFP
- Ave Fénix contra apisonadora -
Frente al ave fénix neozelandés, los 'Boks', un equipo convertido en una apisonadora que no se detiene ante ninguna adversidad, como la derrota en la primera fase contra Irlanda (8-13) para remontar en los últimos minutos los dos partidos eliminatorios que parecían perdidos, 29-28 frente a Francia en cuartos y 16-15 contra Inglaterra en semifinales.
Cuatro años después de su tercer campeonato en Japón, los Springboks están a 80 minutos de convertirse en el primer equipo en renovar el título desde que lo hiciera Nueva Zelanda con el doblete en 2011-2015.
Aunque el premio para el vencedor tendrá mucho más significado que un simple título, ya que París coronará al primer tetracampeón de la historia.
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"Es enorme. Nos hemos preparado tan duro como ha sido posible, sabemos lo que nos espera: no hay nada más grande", ha declarado el capitán sudafricano Siya Kolisi.
Acción de juego de la Selección de Francia
AFP
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Esta décima edición del Mundial de rugby finalizará con este clásico entre dos superpotencias de la disciplina, que curiosamente sólo se han enfrentado en una ocasión en una final mundialista, en 1995, en lo que se considera el partido más icónico de la historia, en Johannesburgo, donde Sudáfrica, que poco a poco dejaba atrás décadas de apartheid, se coronaba ante los ojos de Nelson Mandela, el entonces presidente, que entregó la copa al capitán François Pienaar en lo que fue la imagen de la reconciliación.
- Revancha de 1995 -
"Significa mucho, sobre todo por la historia entre los dos equipos, como la final de 1995. El hecho de poderse enfrentar de nuevo, en la final, trae muchos recuerdos a la gente del país. Éramos un poco jóvenes en aquella época, pero nuestra rivalidad comenzó realmente en aquel momento. Cuando vemos los jugadores que tienen, tipos a los que admiramos desde que íbamos al colegio y que disputan su último partido, hay muchas cosas que hacen especial este partido", aseguró el apertura 'Bock' Faf de Klerk.
Una sensación parecida desde el bando contrario. "Estamos en la final del Mundial y notamos como sube la excitación. Tratamos de controlar las emociones (...) Nos concentramos en este partido enorme, que afrontamos con una sonrisa. Sabemos que chocarán dos estilos. Ellos el suyo, nosotros el nuestro", lanzó el seleccionador neozelandés Ian Foster, que tras las duras críticas recibidas en los últimos meses puede despedirse del cargo con el título.
Para imponerse, los All Blacks deberán superar el combate físico que planteará Sudáfrica, que con siete 'forwards' y un solo 'back' en el banquillo de suplentes deja a las claras qué tipo de partido busca: una lucha sin cuartel por cada centímetro del terreno de juego.
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La alternativa para los All Blacks es el juego combinativo que les ha hecho famosos y que se ha traducido en Francia con 48 tries en solo seis partidos. Su wing Will Jordan, está a uno solo de batir el récord de tries en una Copa del Mundo, que comparte con 8 con leyendas como Jonah Lomu y Bryan Habana.