El 'bunker', que permite transformar una tarjeta amarilla en tarjeta roja sin interrumpir el juego, y un conteo regresivo para indicar a los pateadores el tiempo del que disponen para patear serán dos novedades introducidas en el Mundial-2023, anunció este lunes World Rugby.
Esas dos medidas, probadas recientemente en los partidos de preparación para la Copa del Mundo de Francia, tienen el objetivo de acelerar el juego y limitar los tiempos muertos causados por el videoarbitraje y por los remates de los pateadores.
Durante un penal o una transformación, un cronómetro indicará a los pateadores 90 segundos, ya previstos en las reglas del rugby, de los que disponen para efectuar una transformación y los 60 segundos para un penal.
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El 'bunker' ayudará al equipo arbitral a determinar si un jugador debe recibir tarjeta amarilla y abandonar el terreno de juego durante diez minutos o ser expulsado definitivamente.
En caso de duda sobre el color de la cartulina, el árbitro central podrá en un primer momento sancionar al jugador con una expulsión temporal
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Después deberá recurrir a su homólogo presente en el 'bunker', un lugar separado del partido, que deberá revisar la acción para determinar si la exclusión temporal debe convertirse en expulsión definitiva.
El árbitro del 'bunker' dispondrá de hasta 8 minutos para revisar la acción y tomar su decisión, que será comunicada en las pantallas del estadio y por televisión.
¿Cuándo iniciará el Mundial de Rugby 2023?
El Mundial de Rugby 2023, que se jugará por segunda vez en la historia en Francia, empezará el próximo 8 de septiembre con un duelo para 'alquilar balcón'. Y es que en Stade de France, Nueva Zelanda tendrá el reto de vencer al equipo anfitrión que será liderado por Antoine Dupont.
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