Las impresionantes cifras de ventas del patrocinador de la mejor escudería del mundo
En la previa del Gran Premio de Qatar de la Fórmula 1, se dieron a conocer las llamativas cifras que maneja el patrocinador de la vigente campeona del Mundial de Constructores.
Max Verstappen y Sergio 'Checo' Pérez, pilotos del equipo Red Bull.
Ya es la escudería número uno del mundial de constructores, a la espera de ver a Max Verstappen proclamarse tricampeón en Qatar. Red Bull, en 2022, vendió 11.582 millones de latas al año de su bebida energética. Invierte en patrocinios deportivos una cuarta parte de sus ingresos. Y la Fórmula Uno es uno de sus grandes escaparates. El imperio es liderado ahora por el hijo del fundador, Mark Mateschitiz, de 31 años, el hombre más rico de Austria, con una fortuna personal estimada de unos 20.000 millones de euros.
Saltos de la estratosfera, campeonatos conquistados en serie en la Fórmula 1 y dos clubes en la Liga de Campeones: el imperio de Red Bull va mucho más allá de una bebida energética en una ya icónica lata plateada, que nació en un pequeño pueblo austríaco hace casi 40 años.
Al poco tiempo de salir al mercado, a mediados de los años 1980, Red Bull ya dejó de ser una marca cualquiera, gracias a sus llamativas campañas publicitarias y sus extravagantes estrategias de marketing, que le proporcionaron la personalidad distintiva que tiene hoy en día, además de una enorme visibilidad.
Pero esa es solo una de las estrategias de marketing de la empresa que Dietrich Mateschitz, fallecido en 2022 a los 78 años, fundó en su momento inspirándose en unas bebidas que existían ya en Tailandia pero proponiendo un estilo de vida moderno y rompedor.
Así, Red Bull se convirtió rápidamente en la primera marca de una novedosa categoría de producto: las bebidas energéticas.
Desde entonces, la bebida que "da alas" ha ido expandiendo desde su sede central en Fuschl am See, en los Alpes austríacos, sus tácticas publicitarias a numerosos nichos.
El protagonista es casi siempre el deporte y, en concreto, el deporte extremo, como las motos, el bicicross, el vuelo acrobático o el salto de esquí.
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Oleksandr Okipniuk, atleta ucraniano.
AFP
Insólitas campañas publicitarias
Una de las campañas de Red Bull más espectaculares fue el "salto estratosférico" de Felix Baumgartner desde una cápsula a 39 kilómetros de altura.
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El evento, que costó decenas de millones de dólares, fue retransmitido en directo al mundo entero en 2012, como si se tratara de una nueva llegada a la Luna.
"No llevamos el producto a la gente, llevamos la gente al producto", había dicho el propio Mateschitz en 2002 a la revista británica 'The Economist' sobre su estrategia de publicidad.
Dietrich Mateschitz, fundador de Red Bull.
Getty Images
Más allá del deporte, las campañas de marketing de Red Bull se han abierto más puertas los últimos años y llegan incluso hasta la música, con la "Red Bull Symphonic".
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Se trata de un espectáculo de música en el que artistas modernos colaboran con reconocidas orquestas sinfónicas interpretando en estilo clásico sus éxitos, que pueden ser de rap, hip-hop o rock.
Clubes deportivos de alto nivel
Además, Red Bull es propietaria de varios clubes de fútbol, entre ellos el Salzburgo, que este martes cayó ante la Real Sociedad en la Liga de Campeones por 0-2, o el RB Leipzig de la Bundesliga alemana, así como varios otros en Estados Unidos, Brasil o Ghana.
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El imperio es liderado ahora por el hijo del fundador, Mark Mateschitiz, de 31 años y el hombre más rico de Austria, con una fortuna personal estimada de unos 20.000 millones de euros.
El grupo Red Bull no sólo tiene equipos deportivos sino también una casa editorial y un canal de televisión en abierto (Servus TV), un tanto polémico en Austria por su línea editorial conservadora.
Red Bull en números
Red Bull vendió más de 11.500 millones de latas en 2022, bastante más de una por habitante del planeta, y sus ingresos aumentaron casi un 25 % entre 2021 y 2022, para situarse en 9.684 millones de euros el año pasado.
En 2021, Red Bull invirtió unos 1.600 millones de euros en patrocinios deportivos y en publicidad, es decir, alrededor de una cuarta parte de sus ingresos anuales.