El seleccionador brasileño, Adenor Leonardo Bacchi "Tite", se esforzó este jueves para no emocionarse en rueda de prensa, tras la goleada por 4-0 a Chile en el Maracaná, posiblemente su último partido ante la afición canarinha.
"Muchas gracias a los hinchas que comparecieron hoy en el Maracaná, muchas gracias", señaló el técnico, completamente embargado por la emoción, tras ser preguntado por el simbolismo que tenía este partido para él.
Tite anunció el pasado febrero en una entrevista a 'SporTV' que dejará de ser entrenador de Brasil tras el Mundial de Catar, que se disputará entre el próximo 21 de noviembre y el 18 de diciembre, con la presencia garantizada del equipo de Neymar y compañía.
La victoria de este jueves ante Chile en el Maracaná de Río de Janeiro ha sido probablemente su último partido al frente de la pentacampeona del mundo en territorio brasileño.
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El próximo martes el combinado verde-amarillo jugará con Bolivia, en La Paz, en la última jornada de las eliminatorias suramericanas, y los amistosos de preparación para Catar se espera que los juegue en Europa o Asia.
En este contexto, Tite confesó entre suspiros que le han venido a la cabeza "muchas situaciones particulares" de gran "significado" para él.
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El técnico, campeón de la Copa América de 2019 y subcampeón en la edición de 2021 con Brasil, siendo que ambas finales se celebraron en el Maracaná, intentó seguir expresando lo que sentía, pero se quedó sin palabras.
En ese momento, intervino uno de sus auxiliares, César Sampaio, quien agradeció el apoyo de los casi 70.000 aficionados que acudieron al Maracaná y señaló que tenían la expectativa de "retribuirles con un buen espectáculo", lo que acabó ocurriendo.
En la secuencia, el preparador físico de la selección brasileña, Fábio Mahseredjian, dijo sentir "una alegría tremenda" con el estadio "lleno" y admitió que la delegación se va "emocionada" de Brasil con una victoria así.
Brasil, ya clasificada para Catar 2022 desde hace algunas jornadas, vapuleó a Chile por 4-0 y sigue como líder invicto de las eliminatorias suramericanas, con trece victorias y tres empates.
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Neymar, Coutinho, ambos de penalti; Vinicius, que marcó su primer tanto con la absoluta; y Richarlison fueron los autores de los goles brasileños.