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Jugador de voleibol brasileño y un fuerte castigo, tras violento mensaje en contra de Lula da Silva

El 'chiste' de haber escrito un violento mensaje en redes sociales contra el presidente Lula da Silva, le salió bastante caro a Wallace de Souza, jugador de voleibol brasileño.

Wallace de Souza, jugador de voleibol de Brasil
Wallace de Souza, jugador de voleibol de Brasil, en acción de partido
AFP

El Jugador de voleibol brasileño Wallace de Souza no podrá jugar con la selección de Brasil durante un año por haber preguntado a sus seguidores en las redes sociales si dispararían en la cara al presidente Luiz Inácio Lula da Silva , según decidió este lunes el Comité Olímpico Brasileño (COB).

El comité de ética del COB también impuso a Wallace una suspensión de toda actividad deportiva durante 90 días, por considerar que sus declaraciones "promueven e incitan la violencia".

La sanción comienza a ser aplicada a partir del 3 de febrero, fecha en la que se le suspendió de forma cautelar, por lo que Wallace podrá volver a jugar voleibol en mayo y podría regresar a la selección a partir de febrero de 2024.

Wallace, medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, también fue suspendido por tiempo indeterminado por su club, el Cruzeiro, que le exigió que pidiera disculpas.

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La polémica se desató cuando a finales de enero Wallace, un reconocido seguidor del expresidente Jair Bolsonaro, líder de la ultraderecha brasileña, publicó una foto de un arma de fuego en su cuenta de Instagram.

Wallace Leandro De Souza, jugador de voleibol de Brasil.
Wallace Leandro De Souza, jugador de voleibol de Brasil.
/AFP

Entonces, uno de sus 370.000 seguidores le preguntó si usaría el arma para disparar en la cara al presidente Lula y él respondió haciendo una encuesta en la que replicaba esa pregunta.

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Wallace borró el polémico sondeo horas después de haberlo publicado, pero el Gobierno brasileño y otras autoridades anunciaron medidas judiciales.

El suceso ocurrió tres semanas después de los graves ataques perpetrados por miles de radicales de extrema derecha contra las sedes de la Presidencia, del Parlamento y del Tribunal Supremo, en un intento de derrocar a Lula, quien derrotó a Bolsonaro en las urnas el pasado octubre.

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